Vuelven los fichines: abre el primer barcade de Rosario
Impulsados por un sueño y por la nostalgia de una de las principales fuentes de diversión de los 80’ y 90’, tres emprendedores rosarinos le dan vida a un nuevo espacio de la ciudad que combina las máquinas de videojuegos originales con la posibilidad de tomar algo con amigos.
Todo niño de los 80’ y de los 90’ sabrá de qué se está hablando cuando se hace referencia a pasarse todo un día jugando a los fichines. Aquellas imponentes máquinas de videojuegos arcade que se alimentaban de fichas y despertaban horas de diversión y consumo, hoy vuelven a estar presentes en la ciudad para el divertimento de los rosarinos.
Es que de los sueños y la nostalgia de tres emprendedores de Rosario nació “Ficha”, el primer barcade de Rosario, concepto que ya existe en otras partes del país y del mundo y que consiste en combinar la posibilidad de jugar a los fichines en sus equipos originales con la de tomar unos tragos o unas cervezas y comer algo en un bar nocturno.
Así, tras largos meses de trabajo y planificación, este viernes 1 de septiembre a las 18 será la gran apertura del espacio ubicado en Avenida Francia al 811 (casi Córdoba), con música, bebidas, algo para comer y la participación de DJ K7 (música en cassettes), como para hacer aún más noventera la cuestión.
Una vez inaugurado, el espacio funcionará todos los días, en el horario de 18 a 2. Sus hacedores quieren que sea una propuesta novedosa en la noche rosarina.
El salón puede albergar hasta unas 100 personas, y allí atronan los viejos sonidos que emiten 10 de aquellos armatostes originales con las versiones auténticas de “Street Fighter 2”, “Snow Bros”, “Metal Slug”, “King of Fighter 97”, “Cadillacs y Dinosaurios”, “Seibu Cup”, “Wonder Boy”, “Double Dragon” y “Captain Commando”. Nada de emuladores ni PCs, todas las verdaderas hechas a placa y Neo-Geo, y con funcionamiento a fichas.
Por el lado de bar, el concepto es de un espacio con barras y sillas, sin mesas ni mozos, con la posibilidad de que las personas compren bebidas (cerveza artesanal e industrial, vermut, fernet y gin tirado, entre otras) y comida del estilo buffet o al paso (por ejemplo, burritos).
En diálogo con RosarioPlus, Guillermo Napolitano, uno de los tres hacedores del espacio junto a Gabriela Tolosa y Ricardo García, contó que la idea surgió ante la falta de propuestas diferentes en la ciudad y la existencia de barcades en otras partes del país como en Santa Fe (Insert Coin) o en Buenos Aires (Bar Destello).
Desde hace cinco meses se encuentran trabajando intensamente en el proceso físico de armar el lugar, pero la idea y los primeros pasos para su concreción comenzaron, en realidad, en febrero del año pasado.
“Queríamos armar un lugar al cual nos gustaría ir, y creemos que cumplimos al menos con nuestro sueño, ojalá que la gente lo entienda y se cope”, contó ‘Pocho’, en el marco de las grandes expectativas de los últimos días previo a la inauguración. “Somos todos medio cuarentones nostálgicos, pero actualizados, jaja. El arcade, los videojuegos, fueron y son parte de nuestra vida”, agregó al hablar de las principales motivaciones para crear Ficha.
Todos, además, trabajan de otra cosa, y de los tres solamente uno tiene una experiencia en negocios del rubro, Ricardo, mientras que Gabriela es contadora y él administrativo: “Por eso también nos llevó tiempo armarlo. Todos trabajamos hasta las 17, y le dimos una lavada de cara importante al lugar. Hicimos la instalación de gas, toda la parte eléctrica nueva, y todo lo necesario como para que sea lo más seguro y mejor hecho posible”.
En el mientras tanto, algunas ocasionales pistas difundidas desde mayo en redes sobre la existencia del lugar comenzaron a generar expectativa y el boca a boca entre los rosarinos, con muchos ansiosos de conocer el espacio y poder disfrutar como adultos de aquel divertimento que tuvieron como niños, o así también para que disfruten los que nunca llegaron a conocer las máquinas de este estilo. Será cuestión de reaprender los viejos trucos, o descubrirlos en el caso de los más jóvenes, y a ponerle fichas a la máquina para jugar.