Autoahorro, la pesadilla del auto propio
La descomunal inflación de los últimos años repercutió, entre otras cuestiones, en el valor de los autos 0KM, cuyos precios aumentaron hasta un 90 por ciento. Como resultado, la cuota de los planes “autoahorro” se disparó, volviéndose un verdadero dolor de cabeza para miles de personas que soñaban con un auto propio y que ahora viven una pesadilla.
Un nuevo informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso) correspondiente al mes de junio analizó la modalidad de instrumentación de estos planes tomando como ejemplos casos de ahorristas rosarinos y detalló los distintos problemas que estos deben afrontar.
En primer lugar, señala que en los últimos 7 años se han otorgado un total de 1.273.772 Planes de Ahorro, los cuales se promocionan como formas de adquirir un auto 0km en hasta 84 cuotas (7 años) sin pagar interés. A partir del pago de cierta cantidad de cuotas uno puede obtener el auto por sorteo o por licitación y utilizarlo antes de terminar de pagarlo.
En tanto, explica que la devaluación en torno al 120% que se produjo desde 2018 repercutió en el valor de los autos 0KM, cuyo precio de mercado aumentó entre un 60% y 90%. Como consecuencia, la cuota de los planes “autoahorro” subió en forma abrupta y en varios casos la imposibilidad de su pago.
Por otro lado, advierte que “los gastos ocultos del Plan resultan en un costo irrecuperable que se suma a las trabas para salir del sistema autoahorro”. Es que las cuotas incluyen gastos de seguros, administrativos, derechos de inscripción y adjudicación que pueden superar el 30% del importe total pero al momento de salir y solicitar el dinero invertido sólo te devuelven la cuota pura (sin gastos administrativos y seguros).
En tanto, menciona que una vez que se adjudica el auto aparecen nuevos gastos que puede alcanzar el 15% del valor del auto. Se trata de derecho de adjudicación, impuesto, patentamiento, flete, prenda y seguro.
En consecuencia, deduce que los ahorristas suelen pagar sus autos más caros que los precios de mercado. “Una persona que compra un auto 0KM accede a un precio con ciertos descuentos o bonificaciones mientras que aquél que tiene un plan ahorro sus cuotas se actualizan sobre el precio de fábrica”, explica.
El informe menciona como ejemplo que actualmente la diferencia entre el precio de fábrica y de mercado en el ejemplo que utilizamos es de 110 mil pesos.
Así es que el peso de las cuotas se vuelve insostenible para muchos ahorristas. “En el último año, por la devaluación los anticipos de alícuotas subieron en torno al 80%. Estos aumentos superan ampliamente los aumentos salariales, por lo que la participación de la cuota en el salario ha crecido continuamente en el último año”, concluye.
En Rosario son más de 1.300 los damnificados que se autoconvocaron para reclamar por la arbitrariedad de las cuotas, los altos costos administrativos y de seguros, y para denunciar los engaños de las concesionarias al momento de adquirir el plan. Entre los principales pedidos se encuentra retrotraer precios, evitar remates, crear un órgano que regule a las concesionarias y establecer topes a los pagos.