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Para comienzos del año que viene el nuevo sistema de transporte público tendrá nuevos recorridos, entre los troncales, barriales e interbarriales, y las líneas tendrán denominaciones con letras y números. Todas las unidades tendrán aire acondicionado y piso bajo de mayor accesibilidad.

Esto lo adelantó la secretaria de Transporte, Mónica Alvarado, quien detalló que “todas las líneas van a cambiar de denominación porque es un nuevo sistema que diferenciará líneas primarias que van por los corredores principales (avenidas y bulevares transitados), con intervalos de unidades entre 6 y 8 minutos, líneas barriales que acceden a cada uno de los barrios, y las interbarriales de mayor destino de usuarios, y con éstos se reducirán los tiempos de espera”.

La Municipalidad lanzará en marzo la licitación para el nuevo sistema de Transporte Urbano de Pasajeros, y éste estará listo “para el primer trimestre de 2017”, estimó Alvarado. Algunos recorridos permanecerán similares, mientras otros tendrán conexiones completamente nuevas.

La cobertura geográfica del sistema será del 99% de la superficie urbanizada, considerando un área de influencia de 3 cuadras.

Cómo serán las unidades

El pliego prevé más calidad e innovación en el sistema, tanto en las unidades como en el cuidado del medio ambiente. Los coches deberán contar con aire acondicionado frío calor, piso bajo para mayor accesibilidad a los usuarios, rampas retráctiles y espacios para sillas de ruedas o coches de bebés.

Respecto al cuidado del medio ambiente, se usará tecnología de combustión basada en norma Euro III o superior y la posibilidad de ofertar unidades impulsadas con energías limpias (como GNC, híbridos o baterías con recarga eléctrica o solar), y que ya funcionan en una parte de la flota.

Otro de los aspectos destacables del nuevo sistema será la integración tarifaria horaria: esto significa que el usuario pagará el boleto al inicio del viaje, el cual tendrá validez durante un tiempo determinado, en el que se podrá usar más de una línea para conectar y llegar al destino final, que resultará en un 35 por ciento menor del tiempo de espera entre las unidades.