Newell's hizo muestra de su personalidad, la peleó hasta el final, y se quedó con los tres puntos en la casa de Rosario Central, que no supo reaccionar ante el gol de Juan Martín García a los seis minutos de la segunda parte.

El comienzo del partido fue peleado, como todos los clásicos rosarinos, hasta que después de algunos minutos, el local se cambió acomodar y se adueñó de la pelota, jugando cerca del área de Macagno.

La primera clara del partido la tuvo Lucas Gamba. Después de una jugada sensacional de la figura de los primeros 45 minutos, Lautaro Blanco, la pelota le quedó a Damián Martínez, que remató defectuosamente, y en el rebote, Gamba definió por al lado del palo.

Central dominó el partido, y no le dejó tener la posesión a Newell's hasta los minutos finales de la etapa inicial. Cuando Marco Ruben y Emiliano Vecchio se encontraron pasaron buenas cosas para el lado de los de Arroyito, y de ellos llegaron la segunda jugada en la que los del Kily pudieron abrir el marcador. El volante dejó pie a mano al goleador con Macagno, Ruben llegó algo forzado, la picó por encima del arquero, pero la pelota fue para afuera, donde apareció Infantino, que no llegó a definir, de la mejor manera, y Méndez rechazo casi en la línea.

Ampliar contenido
Tweet de Newell’s Old Boys

La Lepra salió con otra cara a la segunda parte, y Central no terminó de acomodarse en la cancha, cuando Juanchon García aprovechó un rebote para poner el 1 a 0, que siendo definitivo, a los seis del complemento.

Después de una gran jugada de Méndez por derecha, el lateral centró para dejar solo a Garro, que definió y en el despeje de Servio, fue donde apareció el nueve leproso para abrir el marcador.

Los siguientes quince minutos fueron donde los de Sanguinetti más dominantes se mostraron, con buena tenencia, ante un Central que seguía en shock. Después de eso, la Lepra se dedicó a defender ya salir de contra, mientras que los del Kily llenaron de centros el área de Willer Ditta y de Cristian Lema, que se cansaron de rechazar pelotazos.

Dejando de lado algunas jugadas en las que rebote tras rebote, Central pudo empatar, Newell's no tuvo mayores complicaciones ante un local que dejó en evidencia, una vez más, la falta de ideas a la hora de atacar.

La visita pudo estirar el resultado en un contraataque donde Ramiro Sordo le ganó a Lautaro Blanco, y luego, mano a mano con Gaspar Servio, definió a las nubes.

Los de Arroyito lucharon hasta el final, pero mostrando más ganas que ideas y buen juego, mientras que la Lepra mostró personalidad, jugó como se juega los clásicos, y se quedó con los tres puntos ante su eterno rival, después de siete partidos sin ganarle.