__tadevel:head__

Este sábado será una jornada única en la que músicos, orquestas, bailarines y amantes de la cultura tanguera se convocan en la plaza Libertad de Sarmiento y Pasco en un encuentro “autogestivo y horizontal” a modo de protesta popular contra la crisis actual producida por las políticas neoliberales del Gobierno nacional. Es parte de una movida nacional que comenzó en Palermo, y que también tendrá su réplica en la ciudad de Córdoba.

‘Milongueando contra el neoliberalismo’ es el nombre de la movida que cientos de tangueros porteños comenzaron a mediados de abril pasado. Se trata de una suerte de festival público, gratuito y al aire libre que logró juntar, en un manifiesto contra el neoliberalismo, a prácticamente toda la comunidad tanguera de Rosario, desde las 16 en adelante. En caso de lluvia, el evento se realizará el sábado 11 de mayo en el mismo lugar.

Los tangueros rosarinos –que prefirieron no hacer distinciones de agrupciones- decidieron reunirse en una jornada con clases abiertas y shows “a modo de enfrentar esta crisis bailando, tocando música en un espacio público, una plaza, porque que es símbolo de muchas cosas, es el lugar de encuentro, de disfrute, de juego, de compartir en familia, en pareja y amigues, pero también es el espacio de reclamo, de lucha social”, precisaron las tangueras Viveka Cáceres y May Cabrera, en diálogo con Rosarioplus.com.

Sucede que el tango nació en el arrabal, en los barrios y en los clubes donde desde muy pequeños se aprendía a tocar de oído, por lo que se trata de un género popular, por lo que “de origen ya es un espacio de militancia social, donde hacemos cultura y tenemos el compromiso de hacernos escuchar”.

En este sentido de compromiso social, “justamente su esencia es contraria al neoliberalismo, el tango es el abrazo, es la unión y comunión de las personas más allá de la edad o el estrato social. Un espacio donde se disfruta con un otro, donde se generan lazos humanos, es una trinchera de lucha”, precisó May Cabrera. 

La propuesta de los tangueros nació tras enterarse “por las redes y por amigues de Buenos Aires que se llevaba a cabo su milonga en abril pasado con estas características y nos pareció apropiado que sea haga efecto dominó en Rosario”. Enseguida empezaron a averiguar por el permiso para hacer la movida en la Plaza Libertad y  congregar a todo el colectivo tanguero de Rosario. “Ojalá que sea la primera de muchas más”, expresaron las jóvenes tangueras.

Sucede que en el marco de la devaluación del peso, la falta de trabajo, el aumento de las tarifas y los costos de vida, los tangueros observaron el descontento social, que generó un vuelco hacia las milongas, que de a poco pierden fuerza en el último tiempo. La falta de recursos de la gente provoca que dejen de ir a las milongas, a los clubes de barrio, a las clases de tango, a ver a una orquesta típica.

“La milongas resurgieron hace varios años: ir de milonga es una ceremonia social, es ritual, es ir a la iglesia, es idiosincrasia; el tango resiste en la milonga y está más vivo que nunca. Fue paradójico, porque el tango estaba en decadencia en Argentina, estaba visto como algo viejo, y Copes lo hizo brillar en el extranjero y eso hizo que volviera a tener luz en Argentina. Precisamente eso es algo que queremos transformar. El tango es nuestro, es identidad y patrimonio y por eso es desde adentro de nuestro país que se deben tomar políticas que lo protejan, lo difundan y lo hagan crecer y que no sea un merchandising para el extranjero, mientras adentro a los trabajadores del tango se les hace cuesta arriba sostener durante todo el año los espacios y las movidas, mejorar el nivel con clases de grandes maestros, si no hay una visión del valor que tiene socialmente”, analizaron las organizadoras del encuentro.

Aclararon sobre el enfoque ideológico que el neoliberalismo que gobierna el país es la destrucción de lo nacional en todos los ámbitos, y “ésta es una convocatoria apartidaria, pero para tomar conciencia de las políticas que se están implementando y dejar de creer en espejitos de colores”.

Finalmente concluyeron: “Hoy la resistencia la sentimos desde no bajar los brazos, no claudicar, resistir nuestros espacios que hacemos nuestros semana a semana.  Tratando de participar de los eventos, los organizadores de milonga toman la modalidad de hacer algunos eventos al sobre, para pagarle a les artistas, se sortean entradas a milongas amigas, pero esto no puede depender solamente del esfuerzo individual, por eso reclamamos acciones concretas que sostengan muy viva la llama del tango argentino”.