Miles de australianos se están convirtiendo a la religión Jedi
Hace algunos años que los censos en Australia traen datos alarmantes: hay demasiados caballeros jedi en el país de los canguros.
Ya todos saben de la popularidad de Star Wars a nivel mundial. Les gusta a hombres, mujeres, grandes y niños por igual. El fanatismo parece trascender toda frontera y ya hay cerca de medio millón de personas en todo el mundo que se hicieron adeptas a este nuevo movimiento religioso inspirado en la saga de películas de la Guerra de las Galaxias, el "Jediismo".
Donde parece ser que La Fuerza está siendo demasiada poderosa es en Australia. En los censos poblacionales, cada vez más personas anotan "Jedi" como su creencia religiosa. Claro que (todavía) no existe ninguna normativa que respalde este tipo de creencia, pero a los australianos parece no importarles eso y el número de afiliados a la religión de la saga galáctica, va en aumento.
En 2006, el censo registró que alrededor de 58.000 ciudadanos se habían unido a la fe Jedi. Luego en 2011 (el censo se realiza cada cinco años) el número subió a 64.000, y actualmente alrededor de 70.000 personas (!!!) afirmaron ser seguidoras de la corriente mística en la que suponemos que George Lucas debe ser considerado una especie de mesías.
¿En qué cree un Jediista?
Ser Jedi no es simplemente ir revoleando por ahi un sable de luz con cara de concentrado; hay toda una filosofía detrás de tener la colección entera de películas, historietas y juguetes de Star Wars. Para empezar, un jediista cree en "La Fuerza", un campo de energía metafísico y omnipresente considerado como la naturaleza fundamental del universo, y según la tradición teológica con la que cada Jedi perciba La Fuerza, hay una corriente monoteísta, una politeísta y obviamente, también hay una rama atea.
Hasta acá todo muy pintoresco, pero ¿cuál es el problema de considerarse un Jedi?
Los más enojados con toda esta movida son los de la Fundación de Ateos de Australia, quienes consideran que toda esta revolución Jedi, es una broma que llegó demasiado lejos y que no es más que para molestar al gobierno. El presidente de esta fundación sostiene que el hecho de considerarse jediista en los censos, afecta a la cantidad de fondos que se asigne a todas las otras religiones (que sí son aceptadas) y que en particular el movimiento de ateos pierda influencia, al darle al país una imagen mas religiosa que la que realmente tiene. Por lo que, al estilo "fuerza oscura", han lanzado una campaña en las redes para convencer a toda la población Jedi que se marquen como "No religioso", para que el presupuesto sea asignado correctamente a los grupos que corresponda. Y todos contentos. ¿O no?