Un periodista llevó dos extraterrestres a la Cámara de Diputados de México
La Cámara de Diputados de México realizó, por primera vez en su historia, una audiencia pública sobre la información tanto nacional como de otros países (Estados Unidos, Perú, Japón y Francia) que se conoce alrededor de los fenómenos Fenómenos Aéreos No Identificados (FANI, es español; UAP, por sus siglas en inglés).
El momento más impactante del encuentro lo protagonizó Jaime Maussan, el presentador del programa Tercer Milenio y que lleva décadas investigando el fenómeno OVNI, cuando presentó dos cuerpos íntegros disecados de presuntos extraterrestres con más de mil años de antigüedad que habrían sido encontrados en Cusco, Perú.
Según expresó el periodista, dichos cuerpos habían sido estudiados por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) mediante análisis de carbono 14.
“Son seres no humanos que no son parte de nuestra evolución terrestre y que después de desaparecer no hay una evolución posterior. De acuerdo a la Universidad Nacional Autónoma de México, quien realizó los análisis de carbono 14, estos seres tienen alrededor de mil años de antigüedad, es decir, no se trata de seres que fueron recuperados en naves (...) sino son seres que estaban sepultados en minas de diatomea —área fosilizada—”, explicó.
Posteriormente, participó de la audiencia el director del Departamento de Astronomía de Harvard y autor de la teoría Ouymuamua, Abraham Avi Loeb, quien habló de su investigación sobre la expedición por el Océano Pacífico y, además, alentó al gobierno mexicano a permitir que los científicos nacionales puedan estudiar el fenómeno FANI.
También, Mariano Tello, director del Centro de Atención a la Sociedad del INAI, dio a conocer que en 2021 aumentaron las solicitudes de información sobre el fenómeno OVNI en el país, lo que obligó a algunas instituciones del Estado a difundir datos y documentos sobre el conocimiento que se tenía.
La audiencia tiene como objetivo normar el criterio de los fenómenos e incluirlo en la Ley de Protección del Espacio Aéreo, volviendo así a México el primer país “en el mundo” en aceptar la presencia de los no humanos en el planeta.