Las escuelas públicas de la provincia iniciarán este miércoles el ciclo lectivo 2021 tras dos días de paro decididos por los docentes del sector, que a la vez fueron convocados por el Gobierno para un nuevo encuentro a fin de destrabar el conflicto laboral.

Bajo un sistema bimodal de clases presenciales y virtuales, los alumnos de escuelas públicas de Santa Fe volverán a las aulas, como lo hicieron el lunes los estudiantes de establecimientos de gestión privada.

La Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé) rechazó la semana pasada la propuesta paritaria de aumento salarial del 35% en tres tramos -que sí fue aceptada por los privados de Sadop- y declaró una huelga de 48 horas que concluyó este martes.

El ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Juan Manuel Pusineri, convocó a pedido de autoridades de Amasfé a un encuentro con esta entidad este miércoles a las 10 en la cartera laboral.

El funcionario destacó que “a pesar de las medidas dispuestas por el gremio, el Gobierno siempre ha demostrado tener vocación de diálogo y de resolución de problemas”. “Vamos a continuar haciendo lo mismo –dijo Pusineri- con todas las entidades sindicales que discuten paritarias en el sector público”.

A la vez, el funcionario se mostró proclive a continuar la negociación con Amsafé porque, dijo, “en la aceptación de la propuesta, las organizaciones que dieron su anuencia a la oferta del Gobierno han planteado diferentes cuestiones para seguir conversando”.

Más temprano, la secretaria general de Amsafé, Sonia Alesso, le había pedido al Gobierno una nueva convocatoria al diálogo. Durante una rueda de prensa, dijo que el acatamiento a la medida de fuerza fue “del 98 por ciento” y anunció que había presentado una nota pidiendo una convocatoria al gremio.

Los docentes de Amsafé resolvieron otro paro de 48 horas para la semana próxima, en caso de no arribar un acuerdo salarial.

El Gobierno propuso un incremento del 35% dividido en un 18% con el pago de los salarios de marzo, un 8% con los de julio y el 9% restante en septiembre, con una revisión en octubre para medir la incidencia de la inflación en el poder adquisitivo del salario.