Los supervisores de las diferentes áreas del casino City Center debieron firmar un acuerdo de conformidad en el cual aceptan cobrar solo el 50% de su sueldo de abril en el marco del no funcionamiento de la empresa por la pandemia. El problema es que el acuerdo no fue voluntario sino coercitivo. Prevé que el 50 por ciento restante sea aportado como subsidio desde el Gobierno Nacional a través de AFIP, pero los empleados no tienen garantías de que eso vaya a suceder.

Los afectados, unos 300 trabajadores, son empleados fuera del Convenio con cargos gerenciales de las áreas de juego, gastronomía, hotel, y maestranza. Los supervisores del área de control -que son exceptuados como esenciales y siguen yendo a trabajar-, cobrarán sólo el 75 por ciento del sueldo por haber reducido su carga horaria, sin contemplar que son el único recurso humano de los 1400 empleados del complejo que se exponen al trabajar durante la cuarentena.

“Algunos fuimos llamados por nuestros jefes, otros por videollamada, y otros en reuniones virtuales grupales, pero todos fuimos obligados a firmar el acuerdo con la empresa, y nos aseguraron que el resto de los empleados también acordarán”, aseguró uno de los supervisores a Rosarioplus.com, que prefirió preservar su identidad por temor a represalias o castigos.

Por otro lado, este medio dialogó con Sergio Ricupero, referente del gremio de los gastronómicos y hoteleros (Uthgra), quien aseguró que “de ninguna manera firmaríamos un acuerdo como ese”. Según él, el subsidio del Estado no aplica en el Casino, ya que es para empresas de menos de 800 empleados, y “son unos 1400”.

Pero el subsidio para empresas más grandes es real, y los gerentes y coordinadores que notificaron a sus supervisores “nos aseguraron que ya fue pedido al Gobierno. El asunto es que aún no nos confirman que lo vayamos a recibir, y si el Estado no lo aprueba, los que acordamos nos jodemos”, explicitó el supervisor. En el DNU decretado para empresas de más de 800 trabajadores se evaluará la situación financiera según la información obrante en el programa ATP de AFIP.

Desde el gremio del juego Aleara ya dieron el aviso de haber suscripto al acuerdo, que en una nota periodística en el pasado 23 de abril precisaron que “es de un 50% de los salarios netos de bolsillo, incluyendo adicionales y también la caja de empleados", y que “se aguarda la reglamentación donde aclare cómo el Estado pagará ese otro 50%”.

El supervisor se quejó que “en empresas más pequeñas es entendible que pase que no puedan pagar los sueldos sin funcionar, pero esta empresa tiene espalda, y la realidad es que vamos a ser los últimos en volver a trabajar después de la cuarentena, nosotros y los boliches. Encima nuestro público mayoritario es el de riesgo, son todos adultos mayores los que consumen los tragamonedas”.

En el acuerdo que firmaron, el monto figura como “oferta por situación de fuerza mayor”, aunque en realidad no tuvieron opciones de no acordar de esa manera. Por considerar sus puestos como “suspendidos”, los trabajadores fuera de convenio percibirán, en vez de sus salarios, el dinero como “una Asignación Compensatoria en dinero No Remunerativa”. Una vez que firmaron el acuerdo, con él expresaron su “total conformidad”.