Grávida impidió antes el aborto de una nena discapacitada, embarazada por violación
La ministra provincial de Género reveló el antecedente de esta ONG clerical que esta semana mantuvo escondida a la niña para que no aborte. "Fue en 2016, también en el Hospital Iturraspe, y el Estado no intervino", reprochó.
El caso de la niña de Estación Garibaldi que resultó embarazada por violación de su padre, y que luego una ONG antiderechos la retuvo en Santa Fe para evitar que aborte, tuvo un antecedente similar hace unos años: una menor de edad, discapacitada, había sido violada y una psicóloga de la misma entidad clerical intervino e impidió la interrupción legal de la gestación. Y lo hizo porque entonces el Estado no intervino, reveló la ministra provincial de Igualdad, Género y Diversidad, Florencia Marinaro.
En diálogo con Ariel Bulsicco en Sí 98.9, la ministra dio detalles sobre las actuaciones en el caso: “Se dio intervención interministerial con Salud y Desarrollo a través de la Secretaría de Niñez. Se puso rápidamente herramientas, y los equipos de Niñez y Salud trabajan con la niña, y los de género con su mamá”.
En un repaso sobre cómo sucedió, Marinaro detalló que “estaba todo organizado para que pudieran concurrir al efector de salud en Santa Fe, y cuando no nos pudimos comunicar con la mamá, estas personas hablaron por ella. Entonces el Estado se puso en alerta para ver dónde estaban. Fueron encontradas el martes a la mañana en un hogar religioso, y la Justicia tomó la medida de poner en tutela bajo la órbita del Estado”.
Consultada sobre qué conocimiento tenía previamente sobre las acciones de la organización Grávida, Marinaro apuntó contra el gobierno anterior: “En 2016 conocimos una situación similar de una niña que también fue interceptada en el Hospital Iturraspe. Era una niña con una discapacidad y fue víctima de abuso. Una psicóloga de esa organización se hizo pasar por empleada del Estado, se llevó a la niña del hospital y continuó con su gestación, y en aquel momento el Estado no tomó ninguna medida. En este caso se actuó rápidamente poniendo a la niña bajo tutela del Estado. La mujer fue denunciada por el Colegio de Psicólogos de Santa Fe, pero el Estado no hizo nada”, reprochó la funcionaria.
Aclaró que “en este caso fue el sacerdote del pueblo quien dio aviso a esta organización sobre la niña que atravesaba el embarazo, cuando tuvo conocimiento en una misa”.
A Grávida no la tocan
La ministra de Género aseveró que su cartera trabaja acompañando casos que surgen con frecuencia con características similares. “Venimos trabajando en muchas otras situaciones de embarazos por abuso intrafamiliar, junto a la cartera de Salud y la de Desarrollo. Se trabajó rápido para que no avance esta agrupación que antepone sus creencias al ejercicio de los derechos de la niña”.
Aclaró entonces que “el Estado no está incentivando o manipulando una interrupción sino que trabaja en equipos interdisciplinarios con los derechos de la niña, víctima de un abuso intrafamiliar. Debemos garantizar sus derechos, poniendo el eje en su decisión autónoma”.
Consultada sobre la posibilidad de sentar una denuncia por privación de libertad, Marinaro aclaró: “No podemos hacer nosotros esa acusación. Sí, pondremos a disposición de la Justicia las herramientas de toda la intervención que viene haciendo el Estado para que ésta determine si hubo una privación de la libertad”.
Escuchá la entrevista a la ministra de Género: