Se llama Miguel Macri y es primo lejano de Mauricio, el expresidente, a quien asegura no conocer aunque se le parece físicamente. Su singular historia de vida está basada en el sacrificio y la solidaridad, entre el trabajo duro y la pasión por los libros. 

Miguel, el Macri rosarino, edificó su lugar en el mundo como herencia italiana. En dos clubes de barrio y en Central, donde fue entrenador de fútbol de juveniles, hizo dos bibliotecas, con libros perdidos, pedidos y encontrados. En la esquina de Cerrito y Corrientes su padre montó una droguería. Frente al comercio de sodio y cloro que ahora lleva adelante construyó una casita a dos aguas cuya puerta de vidrio permite al vecino atento introducir su libro solidario.

Una crónica que funciona como hallazgo periodístico escrita por Pablo Bigliardi.

 “‒¿Y sos pariente del expresidente? ‒pregunto disparando las palabras como al descuido. Su color de ojos es similar a los de Mauricio Macri, y también el angulado corte de su cara.

‒Aahhh, la pregunta del millón –dice sonriendo‒. Mi abuelo y el abuelo de él eran primos hermanos. Pero nunca nos vimos –aclaró‒. Te digo más, hasta me dan ganas de poner el apellido de mi vieja en la tarjeta de crédito.”

El número de junio salió además textos de Marcelo Scalona, Hugo Vitantonio, Rafael Ielpi, Silvina Pessino y Miguel Roig; el ensayo fotográfico “Un rosarino en París” de Sebastián Rivas; una crónica de Julia Comba sobre “Feminismo y fotografía”, y el ya clásico “Visto & Oído” de Juan Aguzzi.

Junto con el nuevo número de la revista Barullo, viene Good Vibes!!! (BlueArt Records), un disco de soul, funk, blues y jazz del organista Mauri Sanchis. El músico español toca el órgano Hammomd B-3, del cual, y gracias a su talento, la empresa constructora lo nombró endorser del mismo.