__tadevel:head__

El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Juan Lewis, se desligó del inminente cierre de la Oficina de Medidas Alternativas Sustitutivas (Omas) que controla los arrestos domiciliarios: remarcó que es un tema que compete al Poder Judicial. A la vez, remarcó un dato importante: más allá del problema que se plantea con esa oficina, no se interrumpirán los controles, ya que los hace la policía. La oficina fue “una experiencia”, con “otra forma de hacer estos controles, una manera más acomodada a lo que requiere el nuevo sistema”.

La Omas “comenzó a funcionar en la ciudad de Rosario por decisión del Poder Judicial, que materializó esa decisión a través de un convenio con una organización no gubernamental”, sostuvo el funcionario. En otras palabras, no le compete al Ejecutivo. “La Omas depende del Poder Judicial, que debe proveer una solución definitiva”, agregó el titular del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, planteando desde su cartera una mirada crítica sobre el funcionamiento de esta oficina creada como prueba piloto.

Sobre el conflicto actual, recordó que en diciembre, dos semanas antes de que venciera el convenio con la ONG, el Poder Judicial solicitó al gobierno provincial tres cargos para las profesionales que se dedican a controlar las medidas sustitutivas de la prisión, arrestos domiciliarios o prohibiciones de acercamiento.

“Los cargos no se pueden proveer de un momento a otro porque todo cargo público debe ser creado por ley”, subrayó. “No obstante ofrecimos la posibilidad de contratos temporarios, por unos meses, mientras la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe soluciona la cuestión de fondo arbitrando los medios para contemplar esos tres cargos, ya sea incluyéndolos en el presupuesto o redireccionando cargos que van quedando sin funciones en razón de la entrada en vigencia del nuevo sistema procesal penal”, sostuvo Lewis.

El ministro señaló que los contratos propuestos como salida transitoria aún no se pudieron realizar porque recién hace un mes los profesionales involucrados acompañaron toda la documentación requerida y subsanaron algunos defectos como incompatibilidades horarias y de inscripción tributaria.