Condenaron al hacker que filtró fotos íntimas de actrices
Un tribunal estadounidense condenó a un año y medio de prisión al hacker Ryan Collins por filtrar fotos íntimas de celebridades del espectáculo hollywoodense
Ryan Collins, el responsable de haber filtrado en 2014 fotos íntimas de varias famosas actrices de Hollywood en el escándalo conocido como "Celebgate", fue sentenciado a 18 meses de prisión en los Estados Unidos, según informó el gobierno de ese país.
Collins fue encontrado culpable de haber "accedido de forma ilegal a más 100 cuentas de correo electrónico de Apple y Google, incluyendo aquellos pertenecientes a miembros de la industria del entretenimiento de (la ciudad californiana de) Los Ángeles", indicó un comunicado del Departamento de Justicia estadounidense fechado este jueves.
Entre noviembre de 2012 y septiembre de 2014, el hacker de 36 años llevó adelante "un sofisticado esquema de phishing para obtener los nombres de usuario y las contraseñas de sus víctimas", indicó el texto, y detalló que "él envió mails a sus víctimas que aparentaban llegar desde Apple o Google", en los que les pedía los datos personales.
"Cuando las víctimas respondían, Collins lograba el acceso a sus cuentas de mail. Tras acceder ilegalmente a los mails, Collins obtenía información personal, incluyendo las fotos y videos" en los que las mujeres estaban desnudas, detalló. Además, en ocasiones el condenado usó un software para descargar todos los contenidos de las víctimas del sistema de backaup de Apple, y desarrolló un modelo de estafa en el que engañaba a las mujeres para que le enviaran más fotos íntimas.
Los investigadores, indicó el comunicado, identificaron "a más de 600 víctimas", entre las que estaban la ganadora del Oscar Jennifer Lawrence, Kaley Cuoco (de The Big Bang Theory), Winona Ryder, Rihanna, Kate Upton, Kirsten Dunst, Scarlett Johansson y Avril Lavigne.
En aquel momento, Lawrence fue una de las más perjudicadas por el incidente debido a la cantidad de fotos suyas que aparecieron, lo que la llevó a ponerse al frente de los reclamos.
"Es un abuso sexual. Repugnante. Es necesario que cambien las leyes, y nosotros también debemos cambiar. Por eso estas webs son responsables", había afirmado en un reportaje con la revista Vanity Fair realizado tras el escándalo.