Los industriales piden “inteligencia” en la importación
La cámara de empresarios de la industria metalúrgica, golpeados por la importación y la recesión, se reunieron con el secretario de Industria de la Nación para pedirle medidas de reactivación de la industria, el consumo y el comercio exterior. Precisaron que la facturación bajó entre un 25 y un 30 por ciento en la línea blanca
El secretario de Industria de la Nación Martín Echegoyen se reunió este jueves por la tarde con la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Rosario (AIM) en Alvear para escuchar las inquietudes del sector y llevarles tranquilidad con el anuncio de un "plan de fomento a la línea blanca para mejorar la competitividad" entre otras acciones de reactivación de la economía.
En ese marco aclaró que la apertura de las importaciones del gobierno "no es indiscriminada", aunque escuchó el pedido de recuperar el comercio exterior con "una administración inteligente" que evite el ingreso de los mismos productos que ya existen en la industria nacional.
El presidente de la cámara que lo convocó, Claudio Mossuz contó a Rosarioplus.com que para el comercio exterior le solicitaron “herramientas como licencias automáticas y no automáticas, y que no se masifique esa competencia cobrando aranceles, ya que por ejemplo con China no podemos competir, con precios 40 por ciento más bajos de los productos”.
Mussuz se mostró conforme con la reunión a la que Echegoyen fue invitado por el consejo de los metalúrgicos y la Federación Industrial de Santa Fe para manifestarle sus preocupaciones del sector, que el propio funcionario "manifestó estar al tanto, ya que el Indec difundió una caída del 7,3 por ciento en la producción industrial en septiembre pasado".
El funcionario fue empapado del panorama en que las industrias de líneas blancas fueron golpeadas por las importaciones, que si bien se viene de años anteriores con caídas y amesetamiento, este año el fue más preocupante: “Le manifestamos que el sector viene arrastrando desde hace varios meses una capacidad instalada del 60 por ciento, el resto es ocioso, y las bajas en la facturación fueron muy importantes, entre un 25 y un 30 por ciento”, precisó el dirigente.
La respuesta del delegado de la cartera de industria nacional fue el anuncio de un plan de mejora de competitividad de la línea blanca (impuestos, costos salariales, logística). Aseguró que se están tomando medidas para incentivar el consumo, cuyos resultados se verán en el mediano plazo para las pymes: la extensión del Ahora 12 al Ahora 18, la inversión en obra pública (como ferrocarril y energía eólica entre otras), y una futura ley de compra nacional para incentivar al comprador y a la integración de bienes producidos en el país.
"Confiamos en su palabra, aunque otras voces del gobierno hablan de alianzas con los Estados Unidos y convenios con China. Vimos intencionalidad en que las pymes seamos proveedoras de las empresas del Estado para algunas obras importantes que se están realizando, como los trenes", precisó Mossuz.
Entre los reclamos de los empresarios metalúrgicos, le manifestaron: "Necesitamos un régimen de bonos de capital, ya que Santa Fe es la segunda que más cobra en porcentajes muy altos. Pedimos previsibilidad y seguridad en el cobro, y respondió accesible, que se estudiará que sea en cinco años; planteamos las alícuotas que estamos pagando a las ART creemos que la nueva ley va a generar más probabilidad de lo que pueda solucionar. Tiene una incidencia muy importante de nuestros costos de la masa salarial bruta; además le pedimos la gestión de antidumping, herramienta de protección con las ventas por debajo del costo de terceros países".
Sobre la mencionada herramienta, el dirigente metalúrgico adelantó que algunas de las empresas ya han solicitado a la Organización Mundial del Comercio, y si es aprobado por la Secretaría de Industria, si ingresa el mismo producto desde el exterior, deberá hacerlo a un precio por arriba del local. Para este trámite pedimos a Echegoyen que se agilice porque hay demoras, pero está saliendo".
Finalmente recordó: "Planteamos que las alícuotas que se están pagando a las ART tienen una incidencia muy alta en los costos, el promedio de las empresas con más de 50 empleados paga unos $1700 por mes. Y consideramos que la nueva ley que se está proyectando va a generar más problemas de lo que puede solucionar".