Perro devuelto al dueño equivocado: se suman casos
Luego de que una joven denunciara que le habían cambiado su caniche tras castrarlo en el Imusa, algunos dueños de mascotas contaron otras malas experiencias
En las últimas horas, trascendió el caso de un caniche que fue llevado a castrar al Imusa y a la dueña le devolvieron otro animal. Luego de que el director de esa institución reconociera que es algo que suele pasar, otros dueños de mascotas también contaron malas experiencias a Rosarioplus.com.
Isabel recordó que hace dos años llevó a castrar su gatito macho y “pasó lo mismo que a este caniche: ví cuando entregaban mi gato a un señor que estaba antes que yo en la fila”, a la vez que recordó que un veterinario quiso entregarle otra gatita a ella. “Los gatos eran iguales, si yo no estaba ahí seguro lo perdía”, remarcó.
Más grave fue el caso de Ariel, quien llevó su gatito a castrar al mediodía y tenía que buscarlo a la tarde. “Le pusieron la anestesia enfrente mío, pude ver que ni lo pesaron y ahí se durmió. No se puede poner anestesia sin pesar a un ser vivo, y era un gato muy chiquito”, remarcó. Ariel recordó que al volver a la tarde, "el gatito estaba anestesiado, estaba vivo pero se notaba que estaba como desmayado”, y le dieron las pastillas que debía tomar. “Me dijeron que en una hora se iba a despertar. Estuve un rato con él dormido, me fui a trabajar y cuando volví ya estaba muerto”, lamentó.
Denuncias de protectoras
Brenda Rodríguez, proteccionista independiente, denunció además en diálogo con Rosarioplus.com presuntas irregularidades vinculadas al presupuesto anual y las políticas de castración y vacunaciones antirrábicas.
Según aseguró, el Imusa recibe más de 13 millones de pesos por año para castrar a 50 mil animales y darles la vacunación antirrábica. “El año pasado se llegó a 20 mil castraciones según su boletín, y este año es un poquito más pero no se llega a los 50 mil como se debería para evitar que se reproduzcan más perros y enfermedades en las villas”, remarcó.
Por otra parte Brenda recordó que suele llevar perros callejeros a Imusa y “hace cinco meses que falta la vacuna antirrábica, que es un servicio gratuito que debería brindar”.
La proteccionista independiente criticó además el sistema de las adopciones. "No dejan tomar fotos a los perros en los caniles y si alguien quiere ir para adoptar, aunque tengan perros dicen que no tienen pero no se pueden adoptar por problemas, y es mentira, según nos dijeron voluntarios”, aseguró.
Sobre el estado en que viven los animales en el Imusa, Rodríguez aseguró que “hay perros enjaulados desde hace cinco o seis años, y no ven ni la luz del sol porque casi no los sacan a pasear”.