Se trata de una nueva tendencia que se impone en la noche estadounidense, pero que causa un gran alboroto en el resto del mundo, ya que es mucho más osado que todo lo que se haya visto antes. Se trata de una moda que instala vestir solo con cinta adhesiva. 

Con diseños jugados, ya que no se trata sólo de mostrar, son pocas las mujeres que se animan a lucir sus curvas, acompañadas por trazos negros, siguiendo esta tendencia. Si se pensó que el Boob Sale, es decir la moda de vestir camisetas mojadas sin corpiño era jugado, esto llega al extremo.

Los más osados, que hasta ahora sólo se trata de mujeres, pero puede que algún varón se anime, van a los clubes y bares "vestidos" con unas cuantas tiras de cinta adhesiva. Siempre colocadas con diseños estratégicos que cubren pezones y áreas íntimas, casi luciendo como un traje de baño, pero que deja bien en claro que sólo se trata de un poco cinta pegada al cuerpo.

El responsable de esta tendencia es Joel Alvarez, diseñador de Miami, quien lanzó una empresa "artística" denominada Black Tape Project. Con esto el audaz creativo pretende mostrar que con uno de los elementos más usados en la vida cotidiana se puede crear diseños únicos, exclusivos y adaptados al cuerpo de cada mujer, claro. 

Aquí algunas imágenes de los que se animaron a esta nueva tendencia: