La historia comienza con un grupo de pequeños empresarios de distintos rubros que compartían una visión común: crear una entidad que les brindara cobertura de salud privada. Para llevar adelante este proyecto, decidieron constituirse como una asociación civil sin fines de lucro. Esto significa que cualquier excedente se reinvierte en mejorar los servicios y prestaciones para sus afiliados, en lugar de buscar beneficios económicos personales.

En un país de economía fluctuante como el nuestro, el trabajo cobra un alto nivel de relevancia. Como nuestros amigos de Demi Salud son conscientes de esta situación, durante años han dedicado todo su trabajo y compromiso a realizar mejoras en sus servicios y retroalimentar su base de afiliados.

Una cuestión destacable es que la toma de decisiones está en manos de una comisión directiva compuesta por sus propios afiliados, los cuales desempeñan sus roles de manera voluntaria, sin recibir compensación alguna. Este grupo, que incluye al presidente, secretario, tesorero, revisores de cuentas y vocales, se asegura de que todas las decisiones se tomen pensando en el bienestar y la salud de toda la comunidad. 

Es así que con el tiempo incorporaron nuevos prestadores, servicios de emergencias y urgencias, asistencia al viajero y cobertura de sepelios. También añadieron prácticas al PMO (Programa Médico Obligatorio) y beneficios adicionales en salud, demostrando un compromiso constante con la mejora continua de sus servicios. 

La calidad de los servicios de Demi Salud se garantizan a través de una respuesta rápida y eficaz a las necesidades de los afiliados. La prepaga continúa manteniendo convenios con importantes sanatorios durante sus 60 años de historia, fortaleciendo su reputación como una opción confiable y dedicada, sin perder los valores de sus comienzos: el acceso a una buena salud para todos.