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La crisis económica afecta a todos los sectores industriales, pero algunos rubros llegaron a una situación "muy crítica y difícil de sostener". De acuerdo al índice de producción industrial manufacturera del Indec, la producción de madera y productos de madera (excluyendo muebles) se contrajo 16,7% en diciembre de 2018, con respecto al mismo mes del año anterior. De esta manera, la producción maderera cerró el año con una caída de 1,3%. Por su parte, la industria del mueble cayó 37,5% en el mes de diciembre, cerrando el 2018 con una fuerte caída de 11,5% respecto a 2017.

"El 11,5 por ciento de baja, es un valor muy alto", afirmó César Federici, presidente de la Cámara de la Industria Maderera y Afines de Cañada de Gómez, y agregó: "Hubo una baja increíble y en uno de los sectores más comprometidos de la Argentina".

En diálogo con Rosarioplus.com, el titular de la entidad gremial empresaria, que agrupa a fabricantes e industriales madereros y afines de los departamentos de San Martín, Belgrano, Iriondo, Caseros y San Lorenzo, comentó: "Hay empresas en Cañada de Gómez (ciudad que fue reconocida como capital provincial de la industria del mueble a fines del 2018) que tienen hace meses una baja en la demanda del 40 o 50 por ciento. Esto implica que haya despidos".

"Desde hace muchos meses hay una baja sostenida de la demanda, eso se traduce en fábricas que han realizado despidos, otras han iniciado el proceso preventivo de crisis o pidieron un REPRO (Programa de Recuperación Productiva), otras están tratando de pasar la situación con adelanto de vacaciones o jornadas reducidas", detalló.

Según indicó el empresario, en el Congreso que la Federación Argentina Industria Maderera y Afines realizó a mediados de 2018, se había concluído que la situación del sector era mala, pero se mantenía cierta esperanza de mejora. Sin embargo, luego de la devaluación, el pronóstico dio un giro. "A fines de 2018, gran parte de las empresas disminuyeron personal. Pasando los meses del verano, que estacionalmente son meses bajos en venta, la situación no mejoró", dijo Federici,.

"La situación es muy crítica y difícil de sostener", remarcó el titular de CIMA, y aclaró: "Los márgenes de rentabilidad están pulverizados".

En cuanto al día a día de las empresas de la región, el presidente del Centro Tecnológico del Mueble de Cañada de Gómez comentó: "En general, lo que están tratando de hacer las fábricas es sostenerse a rentabilidad nula o a pérdida, esperando que la situación mejore en algún momento".

Sobre el precio de los muebles, el empresario explicó que el aumento de los costos de producción (materia prima, servicios, presión tributaria) no se puede trasladar al valor final del producto para evitar una caída aún mayor en las ventas.

El futuro es el día a día

"No hay muchas expectativas de que la situación mejore demasiado", afirmó Federici, al ser consultado sobre las proyecciones del rubro en este 2019. "El empresario está más preocupado por el día a día, por defender la fábrica semana a semana, que en diagramar el año", aseguró.

En cuanto a la actividad en la Cámara de la Industria Maderera y Afines de Cañada de Gómez, el dirigente indicó que se realizan diferentes tareas para "ayudar a tapar baches" que deja la caída de consumo, pero reconoció que si "macroeconomía no anda", la situación del sector es complicada. "Como Cámara, en estas épocas es cuando más tenés que moverte y más fuerte tenés que ser para sostener las fábricas de muebles", apuntó.

"Los ánimos están por el piso, evidencio mucha preocupación. Cuesta ver el camino, todas las variables están en tu contra", señaló el empresario y concluyó: "No está alcanzando la plata para pagar todos los gastos. Hay fabricas que empiezan a desaparecer".