"Pullaro quiere tener una Corte de amigos", replicó Rafael Gutiérrez
El presidente de la Corte Suprema dijo que el gobernador, con sus intenciones de reforma judicial, solo persigue el objetivo de designar jueces que pueda controlar. Camino sin retorno en la pelea de los poderes Ejecutivo y Judicial
El presidente de la Corte Suprema, Rafael Gutiérrez, contestó el fuego cruzado que prodiga el oficialismo, con el gobernador Maximiliano Pullaro a la cabeza, contra la composición del máximo tribunal. “El gobernador quiere tener una Corte de amigos, no independiente. No respeta la independencia de poderes”, lanzó el magistrado.
Esta semana, el titular del Ejecutivo dijo sin vueltas: “Tenemos que renovar la Corte Suprema en Santa Fe, no porque (sus miembros) sean malos, no cuestiono sus fallos, pero necesitamos una Justicia moderna, eficiente, efectiva, que dé respuestas a la sociedad”. Con eso dio a entender que la Corte actual no es ni moderna, eficiente, ni efectiva.
“Para remover un juez tienen que hacer un juicio político. Yo en 49 años de carrera jamás tuve un sumario en contra. Yo tenía 25 años ya en la Justicia cuando ingresé a la Corte y había ocupado ya todos los cargos. Mantuve siempre la misma conducta y trabajé sin preguntarme quién era el gobernador de turno, siempre en la misma línea. Por eso los empleados me ovacionaron cuando llegué al tribunal cuando estaban de asamblea. No permito que degraden los derechos de los empleados y que tampoco se intente sacar la ley de equiparación con la Justicia nacional, que es una conquista nuestra y eso permitió que en 30 años no hubo ningún paro en la provincia de Santa Fe en el Poder Judicial”, enrostró Gutiérrez.
El enfrentamiento entre Justicia y Ejecutivo incluye también el humor dentro de los empleados del Poder Judicial. Este miércoles, en una asamblea del gremio en Santa Fe, los ministros Fabian Bastia y Pablo Coccocioni aparecieron y recibieron insultos y abucheos por parte de los empleados. Y estos quisieron dirigir el malestar hacia los ministros de la Corte.
El titular de la Corte aseguró que “es el Ejecutivo el que tiene la deuda con los empleados judiciales, no firma los decretos de los ascensos, de las vacaciones, les está debiendo 4 meses de aumento de sueldo. Seguimos funcionando normal pese a que tenemos 30% de vacantes en juzgados. Ya veníamos mal porque le pidieron a Perotti que retirara unos pliegos de jueces, defensores y fiscales. Y ahora tardaron 10 meses para designar unos camaristas”.
El ministro de Gobierno Bastia disparó contra tres de los miembros de la Corte que no comulgan con la mesa del Ejecutivo: Gutiérrez, Eduardo Spuler y Roberto Falistocco. “Uno llegó a ese cargo porque era primo de Reutemann, el otro era abogado de Reutemann, y el otro porque tuvo que ver con la negociación de la Ley de Lemas”, acusó Bastia.
Gutiérrez recogió el guante en diálogo con Leo Ricciardino, al aire de Sí 98.9.
“Bueno, Chassman siempre tiene algún Chirolita. Yo tengo 49 años en la Justicia, y ya tenía 24 de carrera cuando llegué a la Corte. Pasé por todos los cargos. Lo que pasa es que el gobernador quiere tener una Corte de amigos, no independiente”, dijo.
Como complemento de esta ofensiva política sobre el máximo tribunal, está el proyecto de reforma judicial que días atrás presentó el bloque socialista en Diputados. Con todo, Gutiérrez coincidió con la propuesta en ese proyecto de aumentar el número de miembros a 7, uno más que los 6 actuales. De todos modos, en la práctica hoy hay 4 ministros en funciones, los nombrados y Daniel Erbetta. “Está bien que sea número impar. La ley dice que tienen que ser 5”, chicaneó Gutiérrez.
Y cerró: “Me preocupa la calidad institucional que estamos viviendo en el país, y sería grave si el gobernador lo copia para la provincia”.