El Salvador inauguró una megacárcel con hacinamiento extremo y el PRO lo festejó
La cárcel más grande de América tiene muros electrificados, celdas de castigo, un sistema que bloquea celulares y hostiles métodos de adiestramiento. La exconcejala Renata Ghilotti y la exdiputada Gisela Scaglia festejaron el sistema.
El Gobierno de El Salvador trasladó la madrugada de este viernes a 2.000 supuestos pandilleros a una nueva prisión que tiene capacidad para unas 40.000 personas y genera controversias por el durísimo sistema de hacinamiento impartido a los reos. En el PRO santafesino lo festejaron.
"Hoy en la madrugada, en un solo operativo, trasladamos a los primeros 2.000 pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT). “Esta será su nueva casa, donde vivirán por décadas, mezclados, sin poder hacerle más daño a la población", publicó informó el presidente Nayib Bukele en sus redes sociales.
A inicios de febrero, Amnistía Internacional (AI) expresó su preocupación por esta nueva cárcel en El Salvador, y expresó su "profunda preocupación", dado que "la construcción de esta nueva prisión podría suponer la continuidad y el escalamiento de abusos".
De acuerdo con las cifras oficiales, bajo el régimen de excepción que dispone de detenciones arbitrarias, aprobado en marzo pasado tras una escalada de asesinatos, se ha detenido a más de 64.000 personas, a las que el Gobierno acusa de ser pandilleros y de las que se han liberado a más de 3.300.
“Una hermosura”, escribió en su cuenta de Instagram la exconcejala del PRO Renata Ghilotti a modo de festejo. También hizo lo propio Gisela Scaglia, exdiputada nacional al retuitear la publicación del presidente de El Salvador y escribir: “Mira Omar Perotti así se trata a los que matan y atacan todos los días"