El fiscal Aníbal Vescovo imputó este lunes a Leila Schmitt por amenazas coactivas y resistencia a la autoridad, en base al apriete que hizo contra los operarios que el viernes quedaron en una precaria construcción de barrio Tablada con la orden de demolerla porque era un aguantadero de delincuentes.

Fuentes del Ministerio Público de la Acusación informaron que la mujer quedó imputada pero recuperó la libertad luego de pagar 400.000 pesos como fianza. No obstante, le impusieron algunas restricciones como la prohibición de acercarse al lugar donde profirió las amenazas, en Ayacucho al 4300, y a una dependencia del Ministerio de Seguridad.

Schmitt es novia de Alan Funes, un muchacho de 24 años, detenido en la cárcel federal de Ezeiza con condenas encima por dos homicidios, extorsiones varias y la conducción de una estructura delictiva cuya actividad principal es la venta de estupefacientes. 

Funes también cuenta en su pesar el crimen de su madre, Mariela Miranda, en barrio Tablada, y de dos de sus hermanos: Ulises, en barrio La Lata, y Lautaro, cuando fue a visitarlo a la cárcel de Piñero. Además, su padre, Jorge Funes, fue baleado hace un par de años en la localidad de General Lagos.

Alan Funes.

El clan Funes se erigió en un bloque duro del narcomenudeo en barrio Tablada y los alrededores del sudeste rosarino. Y sobrevivió a un enfrentamiento territorial con la banda comandada por René Ungaro, con base en el complejo Fonavi de Parque del Mercado y barrio Municipal. 

Los Funes tenían un bunker reconocido en Chacabuco al 4100, y este otro de Ayacucho al 4300 donde el viernes avanzó la topadora y los mazazos por orden de la jueza penal Silvia Castelli, a instancias del Ejecutivo provincial y del fiscal Franco Carbone.

Pero cuando la prensa y los funcionarios se retiraron, apareció Leila Schmitt como a las 9 y media de la mañana, y amedrentó a los trabajadores de Logística del Ministerio de Seguridad que cumplían con la tarea asignada de derribar el ruinoso edificio de dos plantas, escenario de múltiples allanamientos policiales y hechos de violencia.

Amenazó a los trabajadores a los gritos y con captura de fotos con su teléfono móvil. Al salir a la calle fue detenida por la policía.

Leila Schmitt.

La jueza Hebe Marcogliese convalidó el pedido fiscal y le imputó amenazas coactivas y resistencia a la autoridad. 

La joven detenida es hija del mecánico Juan Carlos Schmitt, condenado a prisión por un impactante siniestro vial de 2016 en barrio Belgrano: al volante de un Audi TT, y a 130 km/h, embistió al cadete Damián Orgaz en la esquina de la diagonal Río Negro y Campbell. La víctima circulaba en un ciclomotor que resultó destrozado. Orgaz, de 26 años, murió en el acto. Schmitt fue condenado a 9 años de prisión por ese hecho.