La Cámara de Apelaciones en lo Penal resolvió este mediodia revocar parcialmente la sentencia en el caso por el asesinato de Marcos Guenchul y dictó la prisión perpetua para los tres implicados: Caio Soso y Maximiliano Panero, condenados en primera instancia a 20 años, y Priscila Denoya, la ex pareja de Guenchul, que había resultado absuelta. Tanto el fiscal como el abogado de la querella, Leonel Botta, pidieron la detención inmediata de la mujer. 

El tribunal integrado por los jueces Facundo Becerra, Mariano Aliau y Carlos Leiva condenó en julio del año pasado a Maximiliano Panero, como autor material del hecho, y a Santiago "Caio" Soso, como instigador y partícipe, ambos a la pena de 20 años de prisión por homicidio triplemente calificado con arma de fuego con dolo eventual. 

En cambio, a la exnovia de Guenchul, Priscila Vanesa Denoya, el tribunal la absolvió en fallo dividido por el beneficio de la duda. "Este tribunal no arribó a la certeza de que ella haya sido partícipe del delito aquí juzgado, pero sí que haya incurrido en encubrimiento grave, aunque los indicios no son suficientes para demostrar su participación", dice el fallo consensuado entre Becerra y Aliau. Así, descartaron que la expareja de la víctima haya tenido intención homicida para con el joven personal trainer, y por eso la absolvieron.

Este miércoles, la historia cambió. Los jueces de Cámara Penal Georgina Depetris, Alfredo Ivaldi Artacho y Javier Beltramone revocaron parcialmente el fallo y condenaron a prisión perpetua a los tres acusados del homicidio de Marcos Guenchul. Para los jueces de esta segunda instancia, Denoya fue coautora funcional del delito de homicidio calificado por la relación de pareja precedente, por el concurso premeditado de dos o más personas y agravado por el uso de arma de fuego. 

“Estábamos confiados en que iba a salir faborable, porque las evidencias eran contundentes para con ella y su participación. Por suerte la Cámara supo apreciar eso”, dijo el abogado querellante Leonel Botta, quien recordó que la familia se retiró con un sabor amargo de la decisión en primera instancia de la Justicia. Según especificó Botta, resta la detención de Priscila Denoya y estimó que se realizará una audiencia para revisar su situación cautelar. El abogado no descartó que la ex pareja de Guenchul solicite prisión domiciliaria, dado que recientemente tuvo un hijo. 

El caso

Marcos Guenchul tenía 32 años y era un conocido personal trainer de Echesortu. En julio de 2019 consiguió el régimen de visitas a su nena de tres años tras varios meses sin verla. El día del reencuentro iba a ser el 25 de ese mes, pero dos días antes fue asesinado de un tiro en la cabeza por el sicario contratado, Maximiliano Panero, cuando salió de dar clases en su gimnasio Progress Fitness, en Mendoza al 4900.

Fue abordado por Panero a punta de pistola, y lo obligó a doblar hacia Sucre y caminar unos 30 metros antes de efectuarle dos disparos a quemarropas y escapar en el Peugeot 208 propiedad de “Caio” Soso. Todo esto fue constatado por cámaras de seguridad privadas y públicas de la zona.

El auto sería encontrado dos días después en una cochera, y Soso fue detenido en el aeropuerto de Ezeiza cuando estaba punto de tomar un vuelo al Líbano.

Una vez detenido, Soso confesó que su cómplice había sido Maximiliano Panero, y que “sólo tuvo la intención” de asustar a Guenchul para que no molestara más a Priscila.

A Priscila la detuvieron luego en diciembre, le dictaron prisión preventiva efectiva y quedó imputada como instigadora de un crimen triplemente calificado por el vínculo, la promesa remuneratoria y el concurso premeditado de dos o más personas.

Denoya intentó a través de su situación de maternidad de su hija con Guenchul y su bebé con Soso, conseguir la prisión domiciliaria, pero la Cámara Penal rechazó el pedido.

El móvil principal del crimen fue el conflicto de la pareja por varios temas, la tenencia de la hija de ambos, como el fundamental.

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