El policía baleado Gabriel Sanabria dejó terapia intensiva
Un mes le llevó superar lo peor de su agonía al suboficial atacado a balazos por delincuentes en barrio Saladillo, cuando quiso interceptarles el vehículo para un control. Alivio en familiares y compañeros de trabajo.
Gabriel Sanabria, el policía que fue baleado a fines de mayo cuando participaba de un operativo de control vehicular en zona sur, dejará la Terapia Intensiva, este viernes, y pasará a una sala general.
Después de un mes y una semana en estado crítico, el suboficial iniciará una nueva etapa de recuperación en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez.
"El paciente continuó con la evolución de los últimos días, está despierto, ya claramente desvinculado del respirador y alimenándose de por sus propios medios. Está en condiciones de salir de Terapia Intensiva", indicó el director del HECA, Jorge Bitar.
Respecto a el tratamiento que debe seguir el agente, el médico dijo: "El próximo paso es una intensa rehabilitación, porque un paciente que estuvo tan crítico queda con una debilidad generalizada".
Sanabria fue baleado, el 26 de mayo pasado, al intentar detener un auto en Arijón al 400, que había sido robado días antes. Luego fueron detenidos por el ataque tres hombres (dos de ellos, menores de edad) y una mujer.