Un rosarino de 43 años quedó detenido en Santa Fe por reiteradas estafas a locales comerciales de esa ciudad y de Santo Tomé. Lo curioso del caso es que el arrestado utilizaba su tarjeta de débito para cometer los delitos, por lo tanto, sus datos quedaban registrados en cada transacción, y de esa manera a los investigadores no les resultó difícil rastrearlo.

"La forma de proceder es curiosa, ya que hacía todo con una tarjeta de débito verdadera, habilitada y que estaba a su nombre. Es decir, todos sus datos están registrados", se sorprendió la fiscal a cargo de la causa, María Laura Urquiza.

"No obstante, procedían engañando a los vendedores, por lo cual, no hay duda que se trata de una estafa, tal como lo establece el tipo penal", añadió.

La funcionario del Ministerio Público de la Acusación detalló que los acusados "dañaban la banda magnética de la tarjeta de débito, por lo cual, cuando era pasada por el posnet, el sistema no la leía. Ante la dificultad para concretar el pago, le solicitaban al vendedor que hicieran la transacción de forma 'off line' o manual, tal como se puede hacer con las tarjetas de crédito".

En la modalidad manual, el sistema emite un ticket para que el vendedor lo complete. "Si es una transacción con tarjeta de crédito, esto no reviste complicaciones: el comerciante presenta el ticket que hizo 'a mano' ante el banco que corresponda, la entidad bancaria autoriza la transacción y el vendedor cobra el dinero de la operación. Ahora bien, con la tarjeta de débito, esta operación 'off line' no es válida, porque en las operaciones con débito, el dinero se descuenta directamente de la cuenta sin autorización del banco, lo que no ocurrió en estos casos", advirtió la fiscal.

La prisión preventiva del supuesto estafador fue resuelta por el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Héctor Candioti, a pedido de la fiscal Urquiza. La funcionaria del MPA ya había imputado al timador el último sábado ante el juez Nicolás Falkenberg, magistrado que además resolvió medidas alternativas para una mujer, esposa de aquél, quien también participó en la comisión de los delitos en los locales comerciales.

Por otra parte, hay una tercera persona involucrada en los hechos que ya fue identificada por la fiscal Urquiza, motivo por el cual ya solicitó su detención.