Este domingo familiares, amigos y la comunidad artística, despidieron los restos de Virginia Ferreyra, la joven víctima de una balacera cuando esperaba el colectivo junto a su madre en la parada de la plaza Rodolfo Walsh. El ataque, se supo luego, fue pergeñado por la banda de René Ungaro con el fin de "tirar a cualquiera" para recuperar la zona.

En la cochería Caramuto, ubicada en Córdoba al 2936, en zona oestes de la ciudad, sus allegados se acercaron a dar el último adiós a la joven bailarina de danzas árabes. 

A pesar de la evolución favorable que tuvo tras una serie de operaciones y tratamientos que venía recibiendo por parte del personal del salud del HECA desde el pasado mes de julio, la joven referente de las danzas árabes rosarina Virginia Ferreyra murió en la madrugada de este sábado. 

El feroz ataque fue el sábado 23 de julio a las 19:30 en Isola y Maestros Santafesinos, y en el mismo resultaron heridos Virginia, su madre y un adolescente de 16 que estaba en la plaza con un amigo, quien también evolucionaba favorablemente. Claudia Mercedes Debbio, de 58 años, murió en el momento.

Los imputados con prisión preventiva habían sido contratados para realizar el ataque con promesa remunerativa, y con la intencion de "matar a cualquiera en el barrio" para poder liberar la zona para la venta de droga. El plan, según la teoría de Fiscalía fue orquestado desde una prisión por René Ungaro, detenido como preso de alto perfil en la cárcel federal de Ezeiza.