El vecindario de Génova al 2400, entre De Angelis y Ottone, arrancó el lunes estremecido por el aterrador tableteo de once disparos que arreciaron contra la fachada de una casa y del club Reflejos, tradicional espacio socio deportivo de esa zona de Empalme Graneros. 

El presidente de la entidad contó al móvil de Sí 98.9 que eran las ocho de la mañana, y en el club recién abrían para iniciar sus rutinas de deporte y de los convenios con los programas Potenciar Trabajo y Santa Fe Más. Y en eso estaban cuando cundió el terror al escuchar los estampidos secos e indisimulables de disparos de bala.

"Es la décima balacera en esta cuadra en lo que va del año. Y así lo despedimos una vez más: a los tiros. Acá somos vecinos de mucho tiempo, nos conocemos todos", lamentó Marcelo, quien destacó no obstante la "colaboración permanente" con la Comisaría 20ª, con jurisdicción en el lugar. "Cada vez que pasa esto ampliamos los trabajos con la Provincia, La Municipalidad, Nación, ampliamos la ayuda social para que los jóvenes entiendan que las balaceras no es la salida, ni la venta de droga, ni el consumo. Ofrecemos otra cara: piletas sin cargo a los vecinos, programas con el Estado", destacó. 

"Es preocupante porque esta vez tiraron bajo, a la altura del cuerpo, como para que le pegue a alguien", observó el dirigente barrial. Tras ello, aclaró que el ataque no habría estado dirigido al club, sino a una casa lindera donde impactaron 10 de los 11 proyectiles disparados. 

"Esto no nos frena, al contrario, tenemos que avanzar con el trabajo social, cultural, deportivo. El gobernador Perotti está ayudando para climatizar el natatorio, y nos pidió que incluyamos la mayor cantidad de gente posible. Eso es lo que vamos a hacer, lo que hace falta", concluyó. 

El club Reflejos, esta mañana de lunes. (RosarioPlus)