Seguridad calificó como "positivo" el operativo y minimizó incidentes

Luego del pitazo final del clásico rosarino, los inconvenientes y disturbios comenzaron a jugar. El epicentro fue en la esquina de un famoso bar que suele televisar los partidos en avenida Pellegrini y Paraguay. Más allá de esto, el Ministerio de Seguridad calificó como “positivo” a la hora de hacer un balance del operativo de seguridad.

El coordinador de Seguridad Deportiva de la provincia, Diego Maio, explicó que “no hubo ningún tipo de inconvenientes en el primer y segundo cinturón de seguridad”, esto es alrededor del estadio de Rosario Central. Lo cierto es que en Arroyito había solo festejos por haber quedado en manos canallas el clásico pero la realidad fue otra donde estaban los hinchas de Newell’s.

En la esquina de Paraguay y Pellegrini, tradicional punto de encuentros de los seguidores de Newell's, hubo enfrentamientos con la Policía. Testigos señalaron que un grupo de hinchas "que estaba un poco pasado" atacó con piedrazos a los efectivos y éstos replicaron "con balazos".

Maio dio otra versión. Dijo que un grupo de Central y de Newell’s se “agarraron a golpes y luego agredieron a la policía”. “El balance del ministerio de Seguridad es positivo, se puso mucho énfasis por lo que significa el clásico, se trabajó muchísimo se multiplicaron los patrullajes para evitar conflictos, y el único registrado fue el de Pellegrini y Paraguay”, consideró el funcionario.

Por otra parte, informó que hubo tres detenidos en el estadio: uno por intentar ingresar con pirotecnia, el cual sería empleado, y dos personas con pedido de captura, una por venta de estupefacientes y otra por un robo en Catamarca.