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En tiempos de crisis es habitual observar un crecimiento en la compra y venta de productos en negro, pero si se trata de materiales vinculados a la salud la historia se torna grave. Desde la Asociación de Ortopedias de Rosario denunciaron que desde comienzos de año creció considerablemente la comercialización ilegal de productos del sector, impulsada principalmente por médicos y kinesiólogos.

Claudia Quintero, presidenta de la Asociación, contó en diálogo con Leo Ricciardino por Sí 98.9 que el mercado negro comenzó a crecer hace meses, pero que la situación se agravó notablemente en las últimas semanas. “Con esto hay serios inconvenientes para mantener las estructuras laborales”, lamentó.

Lo que ocurre es que kinesiólogos y traumatólogos prescriben materiales ortopédicos y hacen que los pacientes compren en los mismos sanatorios o clínicas privadas, salteándose así a las ortopedias debidamente habilitadas. “Venden por teléfono, sin habilitación. Son dos clínicas las que fueron pioneras en esto y son las que concentran la mayor cantidad de pacientes”, señaló Quintero.

“Montaron ortopedias clandestinas sin habilitación, sin pagar gastos. Esto perjudica mucho al paciente”, agregó la ortopedista preocupada por la salud de quienes compran en esas circunstancias.

Desde la Asociación de Ortopedias local señalaron a los directores de clínicas como los primeros responsables de esta situación. “Esto es gravísimo y ya lo hemos denunciado en el Colegio de Médicos y la Municipalidad”, avisaron.

En Rosario hay unas 50 ortopedias habilitadas las cuales dan trabajo a 300 personas. La semana próxima en Santa Fe se tratará un proyecto de ley que buscará regular la situación y proteger a los empleados que frente a la crisis y la venta ilegal ven peligrar su futuro.