Cristina Fernández de Kirchner estuvo en Rosario en el marco de 11º Encuentro Nacional de Salud y dejó fuertes definiciones en relación al Estado. Revisando algunas acciones y pensando en las transformaciones que serán necesarias pasada la ola liberal, si es que el peronismo quiere volver a presentar un proyecto de país que seduzca, la presidenta del Partido Justicialista abordó cinco puntos claves. 

“Venimos a hablar aquí con la autoridad de los hechos y de lo hecho. Porque en este mundo líquido e instantáneo, donde se olvida lo que pasó antes de ayer, es bueno recordar que hubo un momento y un país que construyó un sistema sanitario desde el 2003 al 2015 que mejoró la calidad de vida de todos los argentinos, sin distinciones”, empezó diciendo Cristina para puntualizar en distintos aspectos que a continuación se detallan. 

Estado eficiente

Esto no quiere decir que teníamos el Estado ideal y que todo estaba bien, pero sí nos planteamos desde esa realidad de lo que hicimos, la necesidad de volver a reconstruir un Estado, el Estado necesario. Y el Estado también, eficiente. No le tengamos miedo a la palabra eficiencia. Tenemos que construir también un Estado eficiente. Porque la próxima etapa es, como recién lo definía Nico (Nicolás Kreplak) y ustedes me lo habrán escuchado también a mí en otras oportunidades, la del Sistema Integrado de Salud. 

“Pero para eso se requiere un Estado muy organizado, un Estado con mucha información, una gobernanza muy capaz para articular. Porque realmente la inversión entre los subsistemas públicos y privados en la Argentina  son de las más altas, sino tal vez la más alta de latinoamérica", añadió. 

Estado descentralizado 

Cristina, en un momento de su discurso destacó la ampliación de los Centros de Atención Primaria Durante sus gobiernos y la creación de hospitales, además de “la reformulación del programa médicos comunitarios que hoy están desmantelando”, aseguró la exmandataria. “Llegamos a tener hasta 800 compatriotas aborígenes bilingües que nos permitían entrar en las comunidades más profundas de nuestro país para atender la salud”, agregó. 

"Porque no nos quedamos adentro de los edificios de los hospitales o de los ministerios. Salimos también a dar sistema sanitario de equidad territorial. Donde, uno de los programas más lindos que hicimos Argentina Sonríe, con más de 30 camiones sanitarios le devolvimos la sonrisa hermosa a miles de argentinos. Porque hay que salir a buscar a los ciudadanos que no pueden llegar a los centros sanitarios", sumo como ejemplo. 

Más adelante en su discurso volvió sobre esta idea y aseguró que: “Se requiere que repensemos el Estado. Un Estado que no puede ser estático adentro de los ministerios, un Estado que tiene que salir, un Estado cercano, un Estado donde la gente vea que cada empleado, que cada agente del Estado está comprometido con su realidad. Para que no lo vean como un ser privilegiado que argumentan entonces después estos malos gobiernos que llegan y convencen a la gente de que hay que destruir el Estado y no se dan cuenta de que le están destruyendo la vida”. 

Sistema Integrado de Salud

“La salud no es un hecho científico, es un hecho político y social. Y requiere de un modelo de país donde en el que no sólo funcionen los hospitales sino que además se construyan las redes de cloacas para que la gente no se enferme. Donde la gente pueda acceder a una vivienda y donde tengan salarios que les permitan hacer frente a la dignidad de la vida”. 

“Y qué decir del temor a perder el trabajo. Eso también atenta contra la salud mental, con el miedo a perder el trabajo, a que no te alcance la guita, a tener dos o tres tareas porque no alcanza. Salud mental que  crea el temor de perder el trabajo. Problemática de la salud mental que ha atravesado desde las más altas esferas y hasta los escalones más bajos”, sumó. 

Estado para la clase media

Sobre este punto se refirió a la inclusión dentro del sistema de prepagas los tratamientos de fertilización asistida para aquellas familias que no podían tener hijos y que nadie quería cubrir. Y también mencionó el control sobre la cuota de las prepagos como una política que beneficiaba a la clase media. 

“A los que dicen y nos maldicen, que dicen que gobernamos para los pobres. Les recordamos a todos los muchachos y las muchachas de las prepagas, de las que soy usuaria y afectada, que mientras estuvimos nosotros pagaron cuotas justas, no como ahora que te arrancan la cabeza”, expresó la presidenta del partido justicialista. De este modo contrastó con hechos los cuestionamientos que aseguran que al kirchnerismo sólo le interesan los pobres.

Desregulación

Cristina se refirió también, ya casi al final de su discurso, a la desregulación. Lejos de dogmatismos planteó como la desregulación puede hacerse a favor del pueblo o a favor de sectores concentrados de poder. “El otro gran tema que no se animan a desregular, porque estos desregulan a favor de poquitos muy poderosos, el de los remedios. A ver Milei, ya que sos tan guapo, desregulá los medicamentos para que podamos tener medicamentos importados para reducir el costo de los presupuestos sanitarios. A ver si te animás”, desafió.

También aseguró que esta acción “sería muy fácil porque bastaría con articular desde el ANMAT y el ministerio de salud aquellos laboratorios extranjeros que tienen validación de los países con los cuales tenemos convenio nosotros -que son Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Japón- que ya hicieron inspecciones en las plantas de los laboratorios de la India o de China, para autorizar que vengan esos medicamentos”.