Conflicto con trabajadores de Sedronar: “Somos necesarios en la coyuntura de la ciudad”
Trabajadores del Dispositivo Territorial Comunitario (DTC), que reciben a personas con consumos problemáticos, visibilizaron su estado de incertidumbre ante el posible cierre del centro de atención ubicado en la zona oeste de Rosario. El 31 de diciembre finalizó el contrato que mantenían con la gestión nacional, pero desde la asunción de la nueva administración no tuvieron novedades sobre su renovación.
“Estamos en una zona álgida en materia de violencia y problemáticas de consumo. Nos hicieron sentir que somos necesarios en el barrio y en la ciudad teniendo en cuenta la coyuntura que atravesamos”, dijo a Rosarioplus.com Xavier Izurieta, trabajador del DTC.
Son 14 trabajadores, de un total de 20, que dependen de la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Nación Argentina (Sedronar) bajo la forma precarizada de “Beca Fondo Estimulo”. Esta semana realizaron un abrazo simbólico para visibilizar la situación en el centro de atención, ubicado en Bulevar Segui 5440.
“Entendemos que nuestra apuesta a sostener a la institución es porque tenemos cariño al territorio y al barrio. No se soluciona solo militarizando. El Plan Bandera (impulsado por la Ministra Patricia Bullrich) no es una respuesta a los problemas de consumo. Hay que trabajar sobre la contención y prevención, ese es nuestro trabajo, un trabajo indispensable que no puede desaparecer”, reflexionó Izurieta.
El plantel del DTC está compuesto por trabajadores del campo de la salud mental, que desarrollan un trabajo de abordaje de los consumos problemáticos en el territorio, desde un enfoque salud integral y restitución de derechos en condiciones de vulnerabilidad y extrema precarización.
Trabajan con adolescentes y jóvenes de entre 14 y 30 años en la zona oeste de la ciudad de Rosario desde el año 2014, con situaciones de vulnerabilidad extrema en el contexto de crisis social que atraviesa la ciudad. Hacen hincapié en este dato, ya que la desaparición de este espacio implicaría un abandono a jóvenes que encuentran un refugio en el consumo.
“Durante el abrazo simbólico que hicimos esta semana en el centro de atención, también participaron muchos de los usuarios que llegan a la institución. Eso nos hace sentir muy emocionados. Sentimos mucha angustia y tristeza. Seguiremos pidiendo respuestas, tomando medidas para visibilizar la situación. Las políticas de salud tienen que ser integrales y no solo desde la fuerza”, deslizó el trabajador del DTC.