La Defensoría del Pueblo de Santa Fe emitió duros cuestionamientos al Estado provincial y municipal acerca de la falta de prevención en la contaminación del arroyo Ludueña. Luego de la audiencia pública celebrada la semana anterior, el titular de esa repartición, Gabriel Savino, reprochó no haber sido invitado en lo formal a ese espacio de debate, y recalcó: “La Defensoría del Pueblo tiene muchísimo para decir, porque viene trabajando la temática hace años”.

La problemática atañe al vertido de sustancias industriales y cloacales, como también al desecho de residuos en los márgenes y el cauce del arroyo en sus 19 kilómetros desde el origen en Pujato hasta el río Paraná, atravesando los ejidos de Pérez, Zavalla, Funes, Roldán, San Jerónimo, Ljuis Palacios, Ricardone, Ibarlucea y Rosario.

La Defensoría apuntó la existencia de líquidos cloacales en el arroyo. “Las causas que aparecen como posibles son la falta de diferenciación de desagües cloacales y pluviales y fallas en el control de los vertidos de camiones atmosféricos. Actualmente se enuncian obras de tratamiento en el Conglomerado Norte, específicamente para recolección y tratamiento de los cloacales de las localidades de la zona norte”, dijo Savino.

Savino recalcó que desde esa repartición inició tres expedientes relacionados a ese tema, dos en 2022 y otro en 2023. Planteó a los Ejecutivos 32 pedidos de informe y 7 notas a autoridades. Además, mantuvo reuniones con la Municipalidad de Rosario, la Municipalidad de Funes, el Observatorio Ambiental de la UNR y el Centro Universitario de Investigaciones Hidroambientales – FCEIyA – UNR, reseñó Savino.

X de Defensoría del Pueblo de Santa Fe

“A ello se suman otros 11 organismos a los que solicitamos información, como el Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Enress), Aguas Santafesinas SA (Assa), la Secretaría de Recursos Hídricos y el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático de la provincia, entre otros. Además, desde principio de 2023 comenzamos a consultar sobre loteos en zonas de humedales, específicamente aquellos que querían asentarse en el vaso de la presa retardadora del arroyo”, relató el funcionario.

Según las respuestas colectadas de parte de los gobiernos locales, todos aseguran que no hay vertido de líquidos cloacales crudos al arroyo, pero sí en cambio al curso del río Paraná. 

“Uno de los puntos a destacar –manifestó Savino– es que el Comité de Cuenta, creado en 2010, actualmente se encuentra inactivo. Creemos que es de suma importancia reactivar el Comité, porque es un espacio donde participan todos los actores involucrados y que nos permitirá fortalecer una gobernanza que dé respuestas a los desafíos que nos impone el tratamiento del arroyo y, de esa manera, mejorar la calidad de vida a las personas que viven cerca y a toda la comunidad en general”, razonó.

El defensor santafesino también consideró que es importante fortalecer el ordenamiento territorial, restablecer ecosistemas, teniendo en cuenta todos los beneficios que otorgan los arroyos urbanos, repensar un sistema de tratamiento de efluentes cloacales para toda la ciudad, llevar a cabo las obras proyectadas (emisario sur, conglomerado norte, plan director de desagües), sumar parámetros claros de control para realizar monitoreos permanentes e implementar nuevos sistemas de recolección de RSU tipo mallas, sobre todo en los entubamientos del cauce, cerca de la desembocadura con el río Paraná.

Por último, el defensor señaló que es prioritario enfocar esfuerzos en la limpieza del arroyo y la canalización aguas arriba, y puso a disposición la Defensoría a través de su Centro de Mediación y Resolución de Conflictos para convocar a todas las organizaciones sociales, al Estado y todos los actores particulares para entablar una mesa de diálogo con el objetivo de mejorar la calidad de vida a los vecinos de la ciudad de rosario y zona de influencia.