Empleado municipal pidió una coima a un comercio y terminó cesanteado
Es un inspector del área de Control y Convivencia. Exigía 50.000 pesos para no labrar una multa de 100.000 a un comerciante.
La Municipalidad de Rosario resolvió cesantear a un empleado tras confirmar la denuncia sobre un supuesto pedido de soborno a un comerciante. Según trascendió el agente pidió al menos en una oportunidad 50 mil pesos de coima para no labrar multa de 100 mil pesos a un comerciante.
El intendente Pablo Javkin resolvió la cesantía del agente al concluir que se había valido de su uniforme para pedir un soborno y ya firmaron el decreto que lo destituye de sus funciones y lo desvincula de la Municipalidad. La investigación se logró gracias al GPS incorporado a los móviles de control y de cámaras públicas y privadas.
Todo comenzó cuando comerciantes se presentaron voluntariamente en el Palacio de los Leones para denunciar a un empleado municipal que había pedido soborno a sus locales en ocasión de una presunta inspección.
"En el día de hoy como corolario de una investigación administrativa rubricamos un decreto para cesantear a un agente municipal que había pedido coima. Es una medida que busca ser ejemplar en cuanto a la conducta que deben tener los agentes municipales y una buena oportunidad para demostrar que las denuncias ciudadanas sirven y que se respeta también el anonimato de las víctimas", explicó el secretario de Gobierno, Sebastián Chale.