Nación y Entre Ríos combaten nuevos fuegos en islas del delta del río Paraná
Brigadistas forestales nacionales, personal de la Policía de Entre Ríos, de Defensa Civil, y de Bomberos Voluntarios de cuatro ciudades de esa provincia trabajan para combatir por tierra y aire los incendios en las islas Lechiguanas, en el delta del río Paraná.
Los operativos se realizan en el marco del Plan Provincial de Manejo del Fuego, ante la nueva bajante de las aguas que genera material combustible en territorio de islas, informó este lunes la Secretaría de Ambiente entrerriana.
"Por aire la provincia trabaja en el combate con un helicóptero de la Policía de Entre Ríos y un avión hidrante, y si es necesario se pedirá a Nación el avión hidrante para sumar a los operativos", apuntó la titular de esa Secretaría, Daniela García.
Además, personal de la Policía, de Bomberos de las localidades de Gualeguay, Urdinarrain, Villa Paranacito y Gualeguaychú, de Defensa Civil y de Prefectura trabajan por tierra debido a que los incendios detectados en las últimas horas en Islas Lechiguanas, departamento Gualeguay, son "de gran magnitud".
En tanto, el Gobierno nacional, a través del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, puso a disposición 30 brigadistas forestales de distintas partes del país y de parques nacionales, y un helicóptero.
Por otro lado, García resaltó que capacitarán a personal del Ejército en combate de incendios forestales, con formación teórica y práctica, lo que "suma y refuerza las tareas de combatir incendios forestales".
Desde el Gobierno de Entre Ríos se recordó que aún se encuentra vigente la prohibición de realizar cualquier tipo de quemas sin autorización ya que pesa sobre la zona una medida cautelar del Juzgado Federal de Paraná que prohíbe de manera "absoluta, acciones humanas con capacidad de alterar el medio ambiente".
Durante el 2020, los incendios en esa zona provocaron graves daños y gran cantidad de humo y cenizas que cubrieron a varias ciudades por lo que la provincia de Entre Ríos inició causas judiciales ya que consideró que fueron generados para "obtener rebrote como forraje para el ganado, limpieza de la zona y pesca y caza".
En ese entonces, el gobernador, Gustavo Bordet, decretó la emergencia ambiental debido a "la degradación de los humedales y los efectos negativos en la salud".
Asimismo, se instalaron torres de videovigilancia, y la Nación envió aviones hidrantes, helicópteros y personal para reforzar las acciones sobre los incendios; que se sumaron a brigadistas de distintas fuerzas de Entre Ríos, Chubut y Neuquén, quienes evitaron incendios de viviendas y salvaron animales autóctonos.