Un juez prohibió fiestas y boliches en Buenos Aires
La justicia porteña prohibió la realización de toda actividad comercial de baile con música en vivo o grabada por la falta de controles
La tragedia ocurrida en la fiesta electrónica Time Warp en Costa Salguero, donde murieron cinco jóvenes por consumo de drogas, sigue trayendo cola. Ahora la justicia porteña prohibió “toda actividad comercial de baile con música en vivo o música grabada” en la ciudad de Buenos Aires ante el “cuadro de impunidad e inexistencia de control estatal respecto de la actividad nocturna”.
El juez en lo Contencioso, Administrativo y Tributario porteño, Roberto Gallardo, emitió esta sentencia judicial al considerar que los controles que realiza el gobierno de Capital Federal a los establecimientos son “arbitrarios e ilegítimos”.
Además ordenó al gobierno de Horacio Rodríguez Larreta una serie de medidas, entre ellas elaborar un protocolo de actuación de los cuerpos de inspectores y de las fuerzas de seguridad a fin de que se impida la venta de drogas en fiestas.
Con esta resolución, el juez hizo lugar a una medida cautelar peticionada por la Asociación Civil Vientos de Libertad, la Federación Argentina de Cartoneros y Recicladores, presidida por Sergio Sánchez, amigo del papa Francisco; y la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA).
La Cámara que nuclea los boliches porteños, sin embargo, avanzó minutos después de la difusión de la sentencia que no acatarán esta medida judicial.
Jorge Becco, presidente de la Cámara de Locales Bailables porteño, manifestó que se trata de algo “inconstitucional” y remarcó que sus negocios “cumplen con todas las medidas de seguridad”.
“El juez vive en una caja de zapatos”, manifestó Becco en declaraciones a una señal de televisión apenas se supo la información.
Mientras tanto, en Rosario se ultiman los preparativos para la fiesta electrónica que se realizará este viernes en Salón Metropolitano. En este evento se presentará Dj Bosnio Solomun.
Tras la reunión que mantuvieron este miércoles el secretario de Control y Convivencia, Gustavo Zignago, y empresarios de la noche rosarina, se acordó no cancelar el festejo, aunque la venta de entradas fue detenida. Se espera que más de 4 mil personas acudan al lugar.