Critican que ciclovías y bicis públicas "están atadas con alambre"
En diálogo con Sí 98.9, el concejal criticó el esquema de tarifas para las bicicletas públicas que se aprobó el jueves y respaldó su proyecto de gratuidad. También fue duro con el sistema de ciclovías
Ya se sabe que las bicis públicas serán gratis hasta abril y también cuánto costará alquilarlas (un boleto y medio por día), pero el debate está lejos de cerrarse. El concejal radical Jorge Boasso, que había presentado un proyecto alternativo que sostenía la gratuidad perpetua del sistema y la financiación mediante sponsoreo, se mostró muy crítico con la nueva ordenanza.
En diálogo con Sí 98.9, el edil explicó: “Ayer se votaron las dos cosas: tarifa más sponsoreo. La caja del socialismo nunca es suficiente. Primero compraron 480 bicicletas con un crédito internacional no reembolsable, así que les salió cero peso. Segundo, en vez de mantener el sistema, que cuesta unos 5 millones al año en mantenimiento, en un presupuesto de 10 mil millones que tiene Rosario, con publicidad, establecieron tarifas”.
Boasso cuestionó también el momento para el establecimiento de esta ordenanza: “Si va a ser gratuita hasta abril, ¿cuál es el apuro, por qué fijar una tarifa anticipada? Lo que yo dije es que establezcan un período de gratuidad y después sigamos analizando otros proyectos para ver si podemos mantener la gratuidad y mantenimiento con sponsoreo”. Además, defendió la idea de que el sistema no tenga costo y argumentó que de esa manera funciona en Capital y otras ciudades del país y también del mundo.
Además, el concejal fue duro al hablar de la red de ciclovías que está sumando nuevos tramos en el centro de la ciudad y que complementa el sistema de bicicletas públicas: “Se está haciendo como todo lo que hace el socialismo, se ata todo con alambre. Se están forzando ciclovías en un espacio donde es muy difícil que convivan automóviles y bicicletas”, criticó.
Rechazó además la forma en que se intenta promover el uso de bicicletas: “Parece que hay que matar a todo automovilista en una ciudad donde en 24 años no supieron crear o establecer un sistema alternativo. Hay que brindarle a quienes tienen autos, que hoy son 550 mil, una alternativa suficiente como para que voluntariamente lo dejen”.