Los hermanos rosarinos Valentino y Luciano Daverio clasificaron para representar a la Argentina en el Mundial de kickboxing que se disputará a finales de agosto en Budapest, Hungría, pero necesitan ayuda económica para poder costear los importantes gastos.

Ambos son deportistas con una enorme proyección, con tal rendimiento que incluso pudieron participar del Mundial de taekwondo en Finlandia 2023, donde Valentino se consagró campeón en la categoría hasta 65 kilos y Luciano salió tercero en la competencia por equipos.

Ahora, si bien los deportistas y su familia llevan tiempo realizando actividades para juntar fondos como rifas o ventas de comida, el tiempo apremia y por eso solicitan ayuda a la población para poder cumplir su sueño y representar a la Argentina en lo más alto.

En total, necesitan recaudar unos 3 mil dólares para alcanzar el monto necesario para cubrir los gastos de viaje y estadía para participar.

Para colaborar con tal fin, se pueden realizar transferencias a los alias "Luciano.budapest2024" o "tino099.mp" (sin comillas), como así también comunicarse de manera telefónica con Valentino (3413959401) o su madre Carla (3412011723).

Dos hermanos rosarinos necesitan apoyo para viajar al Mundial de kickboxing

Valentino tiene 18 años y comenzó a practicar taekwondo desde los 4 años, consagrándose campeón mundial en 2023, mientras que Luciano, que tiene 15, también arrancó en el mismo deporte. Luego, ambos se perfeccionaron en paralelo también en el kickboxing, donde este mes se medirán contra los mejores rivales de todo el mundo.

Cada cuatro años, los Juegos Olímpicos siempre son el momento en donde se recuerda y se remarca la necesidad de apoyar a los deportistas amateurs argentinos en su largo camino para representar al país de la mejor manera en cualquier competición.

A días de haber finalizado París 2024, los deportistas vuelven a embarcarse en el largo camino de entrenamiento y competencia. En todas las disciplinas los gastos de viaje, estadía y equipamiento para participar de los torneos suelen ser tan costosos que, sin ningún tipo de apoyo estatal, la colaboración de la gente es el único recurso que tienen los talentosos atletas para no interrumpir su desarrollo y poder dejar en alto la bandera albiceleste.