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El ex número uno del mundo, Roger Federer, brindó una entrevista al medio alemán Neue Osnabrücker Zeitung y habló de sus expectativas sobre Wimbledon y los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

El suizo considera que todavía tiene mucho para dar adentro de una cancha de tenis. “Quiero volver a alcanzar el éxito una vez más y ganar el octavo título de Wimbledon, aunque si bien un Grand Slam es de alta prioridad para nosotros, los Juegos Olímpicos son distintos, debido a que si se pierde, la decepción es enorme porque esta oportunidad solo llega una vez cada cuatro años”.

Y aunque todavía no ha pensado en la posibilidad de su retiro las preguntas sobre qué hará cuando se aleje de las canchas son una constante. “Una vez retirado, no me veo como entrenador teniendo que volver a hacer las giras. Tal vez podría hacerlo cuando mis hijos se vayan de casa, pero será dentro de unos 20 años cuando tenga 54, y no sé si tendré ganas de hacerlo. Tal vez tenga deseos de viajar por el mundo con mi mujer y para entonces ya sea abuelo”.

Al cierre de la entrevista, Roger, habló de los que han sido sus dos grandes rivales en todos estos años, Novak Djokovic y Rafael Nadal. "Es muy complicado detener ahora a Djokovic. Está muy sólido en todos los aspectos, con muy estado físico y de cabeza, además ha sabido conciliar su nueva situación familiar. Es un gran salto en la vida de uno y puede ser muy inspirador como me pasó a mí en el verano de 2009 cuando Mirka estaba embarazada y gané París y Wimbledon, aunque también puede ser una distracción".

Sobre Nadal consideró: “soy un gran fans suyo. Fue el más grande y difícil oponente que he tenido. Por tanto tengo el máximo respeto hacia él. Soy la última persona que se detiene a pensar que aún puede lograr algo, sé lo bueno que es”.