Mano a mano con el encargado de demostrar que Vilas fue N°1
“La gente cree que la historia la escribe el que la escribe, pero la historia la escribe el tiempo”, se escucha decir a Guillermo Vilas en un pasaje del tráiler del documental "Vilas: serás lo que deberás ser o no serás nada", que el 27 de octubre pondrá en pantalla Netflix y que sigue la historia de la leyenda del tenis argentino y su incansable lucha, junto al periodista e investigador Eduardo Puppo, para ser reconocido como número uno del mundo.
Gracias al sostenido reclamo de Puppo, quien se enfrentó a una de las corporaciones deportivas más grande del mundo con datos concretos y estadísticas científicas, finalmente el tiempo le dio la razón a Vilas de que había sido desplazado injustamente de la cima del tenis mundial.
“A Vilas lo vi jugar por primera vez en el 74, pero recién lo conocí pocos años después cuando estaba estudiando periodismo y le empecé a hacer notas. Así fueron los inicios de mi relación con él, pero comenzó a consolidarse allá por el 2007 cuando hicieron una revisión y le reconocieron el número uno del mundo a la tenista australiana Evonne Goolagong”, contó Puppo a Rosarioplus.com
A partir de ahí empezó a investigar qué pasó con los rankings de Vilas y sobre el tema puntual de la restitución de su número uno. El periodista conserva celosamente los secretos del tenista más grande de la Argentina y resguarda su historia.
“Guillermo y su madre fueron acumulando prácticamente todo lo que usó su carrera como jugador, así como también objetos personales. Cuando me permitió ir a su casa porque comencé a escribir un libro en un principio me recibía en el living, pero cuando la relación se afianzó me habilitó a ingresar a los otros sectores. En el último piso tenía guardado copas, raquetas e indumentaria y fue impactante, porque era lo que habíamos visto en fotos, revistas o por tv”, contó.
Lo que más le llamó la atención a Puppo era que tras terminar el último partido de algún torneo importante, cuando Vilas iba al vestuario se sacaba toda la ropa: vincha, short, remera, zapatillas y raqueta, metía todo en una bolsa, la ataba y la guardaba en una valija. “Cada vez que volvía a su casa guardaba cada una de esas valijas y nunca más las volvía a tocar. Yo tuve el honor de que cuando se hizo el inventario de todo lo que tenía, las vi y ahí estaba todo sin abrir. Ese proceso de acumulación permitió resguardar su propia historia”, detalló.
La película que pronto estrenará Netflix está basada en la investigación que revisa todos los resultados que conformaron los rankings del tenis masculino mundial entre 1973 y 1978. “Una vez que recopilé todo el material, hice la cuentas y apareció el matemático rumano Marian Ciulpan quien le dio la visión científica y confirmó que números estaban correctos, presenté todo el material a la ATP para vean lo que habíamos estudiado y los resultados".
Luego continúa: "Ellos se tomaron un par de meses para considerarlo y la respuesta para reconocer a Vilas como el número uno del mundo fue negativa, por lo que enviamos un anexo con todos los requerimientos, luego hicimos un segundo y tercer estudio que seguían avalando que nuestra investigación era correcta. También lo confirmó una auditoría que se hizo en España”, confió Puppo y agregó: “Vilas no merece ser el uno, si no que le corresponde ser el uno y la ATP en algún momento lo va a tener que reconocer. Las pruebas para que la restitución sea un hecho fueron presentadas a la justicia”.
Las cuestiones legales comenzaron allá por el 2015 para que el reconocimiento no quede en un reclamo de un periodista a un dirigente. “Tras la tercera negativa incluimos al equipo, que también conforma mi esposa María Luz Marín, al abogado Adrián Sautu de la Riestra para demostrar que para hacer justicia no existen dos verdades, hay una sola y queremos que sea la que el mundo del tenis se entere. Gracias a esta película existe la posibilidad que millones y millones de televidentes podrán hacerlo y que los dirigentes vean con otros ojos que esto pasó y que hay una persona que está esperando una decisión que puede cambiarle la vida”, concluyó.