POR JUAN PABLO GÓMEZ 

Newell's parece no tener paz. Al mal momento futbolístico, el despido del director deportivo, el Coloso pidiendo la renuncia del entrenador y del presidente, se le sumó un conflicto por la salida fallida de Ian Glavinovich.

Estaba todo listo para que el zaguero fuera cedido al Vasco da Gama por un año a cambio de 250 mil dólares con una opción de compra por 2,5 millones por el 80% de la ficha. Sin embargo, el TMS de Brasil cerró a la medianoche del martes y no llegó la documentación necesaria.

Según informan desde Río de Janeiro, Newell's envió los papeles fuera de tiempo, lo que hizo que la transferencia fracasara. Según dirigentes aurinegros, ellos tenían todo preparado para recibir al jugador, pero el error fue de sus pares rojinegros.

Si bien desde el Parque Independencia no se pronunciaron oficialmente, hicieron circular un comunicado por redes sociales informando los detalles de la negociación y asegurando que fue Vasco quien “optó por no hacer uso del préstamo”. 

Desde el entorno de Glavinovich aseguran que el jugador está muy golpeado por la situación y descreen de la versión enviada por la dirigencia rojinegra. El malestar aparece también por una supuesta presión que hubo para que el oriundo de Elortondo renueve su vínculo con el club a cambio de garantizar su salida.

Afirman que difícilmente el zaguero pueda volver a calzarse la rojinegra en el corto plazo por esta situación y la poca consideración que tiene Sebastián Méndez de él. Ahora buscan un nuevo destino y Talleres aparece como una posibilidad, aunque todavía no hay ningún avance concreto.