POR RAMIRO PORTILLO

Omar Arnaldo Palma, fallecido este lunes en Rosario, será recordado y homenajeado como el máximo ídolo de la historia de Central. El Negro es el máximo ganador de la historia auriazul con dos títulos de primera división, uno en la segunda categoría y la Copa Conmebol en 1995. Además, fue clave en los partidos decisivos que derivaron en la obtención de dichos títulos.

Luego de establecerse en Rosario proveniente de Campo Largo, Chaco, debutó en la primera Canalla en 1979 de la mano de Don Ángel Tulio Zof. Ya en el Nacional de 1980 debutó en las redes, ni más ni menos, que contra Racing de Córdoba en la goleada en el Gigante de Arroyito.

Tras el descenso en 1984, fue pieza clave en el elenco que logró volver a primera división bajo la conducción de Pedro Marchetta. El Negro aportó 10 goles en aquella campaña que devolvió a la institución de Arroyito a la máxima categoría.

La historia marcaría que tendría un muy breve paso por Colón de Santa Fe para luego volver su casa, Rosario Central. Con la vuelta de Don Ángel al banco de suplentes, Palma fue el máximo artillero del certamen 1986/1987 con 20 goles en 38 partidos. Cómo si fuera poco, pateó y convirtió el penal en la igualdad con Temperley, que le significó el segundo título de su carrera.

Un derrotero por River y México lo separó de Rosario unos años, sin embargo, los colores auriazules y el Negro se volvieron a encontrar y dieron otra vuelta olímpica. En 1995, nuevamente con Don Ángel en los bancos, Rosario Central se adjudicó la Copa Conmebol. En dicho certamen y con 38 años, Omar aportó su penal en la tanda definitoria contra el Atlético Mineiro.

Casi 400 partidos, más de 60 goles y cuatro vueltas olímpicas lo ubican a Omar Arnaldo Palma en un indiscutible primer lugar de ídolos Canallas, al menos como futbolista. El Diez desapareció pero solo físicamente; sus goles, sus recuerdos y su amor por Rosario Central ya son parte grande la historia de Arroyito.