Bartolacci advierte un “segundo semestre complicado” si no mejora el salario docente
El rector de la Universidad Nacional de Rosario explicó que si bien el Gobierno otorgó un incremento presupuestario para los gastos de funcionamiento, no ha ocurrido lo mismo con los sueldos de los docentes y no docentes, siendo que “más del 50% están por debajo de la línea de la pobreza”.
El rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Franco Bartolacci, advirtió que si bien el Gobierno nacional ha mejorado el presupuesto para los gastos de funcionamiento, no ha ocurrido lo mismo con los salarios de los docentes y no docentes, y que si no hay una mejora pronto “vamos a tener un segundo semestre naturalmente complicado”.
A raíz de los reclamos de las universidades nacionales y la comunidad educativa ante la inviabilidad de poder sostenerse con el presupuesto de 2023, algo que se canalizó especialmente en la gran Marcha Federal Universitaria del pasado 23 de abril, el Gobierno decidió ceder y otorgar un incremento del 260% para los gastos de funcionamiento.
Sin embargo, el mismo representa solo un 5% del presupuesto universitario total, y así como hoy hay obras que están congeladas por esta falta de financiamiento, el mayor de los problemas radica en los trabajadores docentes y no docentes, siendo que “más del 50% perciben salarios por debajo de la línea de la pobreza” y que son de entre un 40% y un 50% por debajo de lo que deberían estar cobrando.
“La situación es idéntica en todo el sistema universitario, y es realmente muy dramática. La pérdida del poder adquisitivo ha sido fenomenal en el contexto inflacionario que atravesó y que atraviesa la Argentina, y no hay respuestas hasta el momento satisfactorias a lo planteado tanto por los representantes gremiales como por el Consejo Interuniversitario Nacional”, dijo Bartolacci en diálogo con la Sí 98.9.
En ese sentido, agregó que “de no mediar respuestas con cierta urgencia, que implicarían un incremento razonable –es decir, que acompañe razonablemente lo perdido respecto de la inflación-, vamos a tener un segundo semestre que va a ser naturalmente complicado”.
El titular de la UNR reconoció, por un lado, que el incremento para los gastos de funcionamiento “descomprimió la situación, hace que sea más previsible el año y da herramientas para poder planificar las actividades de acá a diciembre de este presente año”, y que lograr el mismo era importante ya que “cuando se discuta el Presupuesto para el próximo año en el Congreso Nacional, se discutirá sobre la base del Presupuesto que se ejecuta en el año corriente”, por lo que “no era lo mismo hacerlo sobre la situación anterior, que era muy crítica, que en este nuevo contexto”.
No obstante, remarcó que “la situación salarial que atraviesa el personal docente y no docente de las universidades aún no encontró una resolución positiva”, y que “de la misma manera que decimos que una universidad no puede funcionar si no podés pagar la luz, el agua, el gas o los servicios básicos para que las aulas estén abiertas, tampoco se puede funcionar ni hay universidad de excelencia sin salarios dignos para los trabajadores de la educación”.
Así también, remarcó que con el Consejo Interuniversitario Nacional se han reunido previo al receso con las autoridades nacionales, donde les manifestaron la necesidad de incremento salarial a los trabajadores y la necesidad de recomposición de los programas de asistencia a las becas estudiantiles.
“Todo el Consejo Interuniversitario Nacional, luego de la reunión que tuvimos antes del receso, sacamos una manifestación planteando la situación crítica, que es de emergencia, que atraviesan los trabajadores docentes y no docentes de todas las universidades nacionales”, agregó Bartolacci.
En ese sentido, el rector de la UNR detalló que hoy “un auxiliar de primera inicial, que es el rango más bajo, cobra algo más de 140.000 pesos”, mientras que “un titular exclusivo, es decir la máxima categoría, con máxima dedicación inicial, cobra menos que un trabajador inicial bancario”.
“Remarco esto y no porque me parezca mal que un trabajador bancario cobre lo que cobra, sino que lo insólito es que alguien que dedica toda su vida y está en el máximo rango en la formación de los futuros profesionales del país, esté cobrando lo que está cobrando”, dijo Bartolacci, que consideró que esta desigualdad “es consecuencia de que no hay interés por priorizar y jerarquizar la formación universitaria pública, que es lo que venimos discutiendo desde el principio del año”.
Actualmente, desde las universidades les están pidiendo a los diputados nacionales de todos los bloques que sesionen al respecto del presupuesto universitario, ya que “si bien se dio este incremento del 270%, es importante que se trate por ley, porque al estar aprobado por ley, queda fuera de la discrecionalidad de las autoridades del turno y da otra previsibilidad al sistema”.
De la misma manera, también les están pidiendo a los legisladores “a partir de un proyecto que se presentó como consecuencia de esta reunión que tuvimos antes del receso los rectores con las entidades gremiales, el tratamiento de un proyecto específico para establecer una cláusula y una pauta de incremento salarial que recomponga la situación que atraviesan los trabajadores docentes y no docentes de las universidades nacionales”.
Finalmente, Bartolacci destacó a la Sí 98.9 que este año ha habido en la Universidad Nacional de Rosario “un incremento como nunca antes de la matrícula de inscripción”.
“Nunca la universidad, de un año para otro, había tenido un incremento tan importante, alrededor del 25%. Eso se dio por dos razones, básicamente por la creación y puesta en marcha de nuevas carreras, que concitan mucha atención, y también porque hay un desplazamiento de estudiantes de universidades privadas a universidad pública, porque se le ha hecho muy costoso la erogación que implica el sostenimiento de las cuotas. Pero naturalmente la crisis económica hace muy difícil para muchos estudiantes poder garantizar la continuidad de su carrera, vivir en Rosario con todo lo que ello implica. Por eso nosotros, a pesar de todas las dificultades que tuvimos el primer semestre, priorizamos obtener los programas de becas, el comedor universitario, ampliar las residencias estudiantiles, es decir, todos los dispositivos que la universidad tiene para acompañar sobre todo a los estudiantes que están en una situación más compleja y que a veces algunas de estas herramientas son definitorias para que puedan continuar con su carrera. No tenemos los datos, porque el corte estadístico va a ser a fin de año, pero estamos haciendo todos los esfuerzos para que nadie tenga que dejar por esta razón sin desconocer que la situación es tan difícil que puede provocar naturalmente que a algunos estudiantes se les haga más complejo o venir a estudiar en la ciudad de Rosario o tener que continuar con su carrera, porque algunos tienen que optar por empezar a trabajar, y eso demora el tránsito por la vida universitaria”, finalizó.