Un día en la vida de una mujer sin nombre. El día en el que frente a dos tazas de té ella intenta llenar la silla vacía con los ojos de un hombre. Un hombre cuya existencia fue y será una incógnita. Todo el mundo dice que el amor duele. Pero no, no es eso, el amor no duele. Duele la mentira, duele el alma, duele el estómago, el rechazo duele, el silencio. El amor no. La gente, usted, confunde eso con amor. Pero el amor es otra cosa.

ERRE. La estación de los ojos mudos se puede ver a las 22 en el Teatro La Manzana (San Juan 1950).