Todas las fuerza policiales de Francia se encontraban movilizadas este miércoles con un mismo objetivo: encontrar a los responsables de la matanza registrada en la sede de la revista Charlie Hebdo, en la que murieron doce personas y cerca de veinte resultaron heridas.

El ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, aseguró que el objetivo es "neutralizar" a "los tres criminales" que cometieron este miércoles por la mañana el atentado en París.

"Se han movilizado todos los medios" para detenerlos y que "sean castigados con la dureza que merece el acto bárbaro que han cometido", declaró a los medios de comunicación Cazeneuve al término de una reunión de urgencia organizada en el Palacio del Elíseo por el presidente francés, François Hollande.

El ministro, que se ha puesto al frente de una célula de crisis del Gobierno para coordinar las operaciones antiterroristas, subrayó que el objetivo es "neutralizar a los tres criminales en el origen de este acto bárbaro".

Confirmó que el ataque causó la muerte de doce personas, además de una decena de heridos, "cuatro en situación de urgencia absoluta".

El Ejecutivo ha elevado el nivel del Plan Vigipirate a su máximo, el de "alerta de atentados", en la región de París.

Cazeneuve envió un telegrama a todos los prefectos (delegados del Gobierno) de Francia para que aumenten la protección en estaciones, lugares religiosos y otras instituciones sensibles.

En París, se han puesto en marcha dispositivos de protección suplementarios en los transportes públicos, las galerías comerciales o los centros escolares. También se ha decidido proteger la sede de algunos medios de comunicación.



De acuerdo con los elementos conocidos, los terroristas llegaron poco después de las 11, hora local, a la sede del "Charlie Hebdo". Entre los doce muertos figurn el periodista, dibujante y director de Charlie Hebdo, Stéphane Charbonnier, conocido como "Charb", y otros tres de los principales dibujantes del semanario satírico francés, Cabu, Tignous y Wolinski, figuran entre los 12 muertos del ataque. Además, murieron dos policías.

En su huida, los atacantes dieron varios gritos de "Alá es el más grande" y "hemos vengado al profeta", en lo que se considera una alusión a la publicación por el periódico satírico de caricaturas de Mahoma. 

El presidente francés, François Hollande, quien se hizo presente en el lugar de los hechos, declaró que "no hay duda" de que se trata de "un atentado terrorista".