Viruela del mono: el peligro mortal es bajo, pero todavía no hay vacuna
La infectóloga Andrea Uboldi explicó las características de esta nueva plaga que ingresó al país con un primer caso desde Europa. La manera de advertirla y de prevenirse.
Con la detección del primer caso de viruela del mono en Argentina, el alerta va tomando cuerpo en el medio local. Una especialista como la infectóloga y exministra de Salud Andrea Uboldi señaló que todavía hay mucho por conocer de esta enfermedad, pero que por lo que se sabe hasta ahora, la mortalidad es baja. Eso sí, no hay vacuna disponible aún, y solo cabe advertir a tiempo y mantener hábitos de prevención.
"El reporte de la Organización Mundial de la Salud habla por ahora de un 10% de letalidad en esta enfermedad, y hasta ahora no se conocen más secuelas que las cicatrices que pueden quedar, como ocurría con la antigua viruela", dijo Uboldi este lunes por Sí 98.9. "Otras formas de gravedad no han sido descriptas. En cuanto al tratamiento, se están ensayando tratamientos antivirales para disminuir las complicaciones. Al principio serán experimentales hasta encontrar la definitiva. Respecto a vacunas, no está disponible la que teníamos antes porque fue retirada en 1980, pero sí hay una vacuna licenciada en 2019 para esta viruela del simio, y se está revisando en este momento para ver si hay producción en escala".
Uboldi ubicó el alerta el domingo 15 pasado, cuando la OMS emitió oficialmente la información sobre la aparición de casos de esta viruela del simio en personas. Lo extraño es que se trataba de una zoonosis causada por un virus localizado en África que se transmitía entre animales, y de animales a humanos, pero no entre humanos directamente como ahora sí ocurre. "El contagio inter humano motivó el alerta, y eso es lo qeu se está investigando ahora", explicó la experta.
El caso detectado este domingo en Buenos Aires refiere a una persona que regresó días atrás de España. "Es una enfermedad viral que requiere haber estado en contacto con alguien infectado para contagiarse. Lo más característico son las ampollas con contenido turbio en manos, pies, boca, genitales, y cuadro febril con dolor de cabeza, de cuerpo y ganglios", señaló.
"Hay que consultar, en este momento, si regresamos de un viaje al exterior, y examinar si aparecen estas ampollas en las zonas referidas, o síndrome febril de inicio brusco, y eso sí motiva una consulta médica. Y para los equipos de salud, usar los equipos de protección como los que se usan para el covid", agregó Uboldi.
La infectóloga precisó que "el contagio es por vía respiratoria, contacto íntimo cara a cara, algunos reportes vinculan las relaciones sexuales como factor de contagio, aunque no está confirmado. No la relación en sí sino el contacto íntimo y el contacto con la secreción de una ampolla que se rompe si no se tiene un guante".
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