Una situación insólita se dio este domingo en la segunda final de la Liga Interprovincial de Fútbol. Se enfrentaron Arteaga y 9 de Julio de Berabevú, pero el verdadero protagonista fue el árbitro del partido, un conocido del fútbol grande: Fernando Echenique, protagonista de una acción que pocos en el estadio lograron entender.

El juez del partido amonestó al diez de Arteaga, Carlos Siaira, por tirar una rabona. El hecho despertó la indignación entre los simpatizantes locales que descargaron toda su bronca contra el calificado árbitro. Para colmo, ya en el segundo tiempo, Echenique expulsó a un futbolista del equipo anfitrión por una falta discutible.

De cualquier forma, y a pesar de algunas decisiones insólitas del árbitro, Arteaga ganó el torneo Apertura. Frente a 9 de Julio se impuso por 3 a 0 y liquidó la serie que se había iniciado días atrás con un empate en Berabevú.