"Quienes desprofesionalizan la actividad gastronómica son los malos empresarios"
Desde la Asociación Hotelera Gastronómica deslizaron que no consiguen empleados porque hoy los jóvenes optan por otras opciones. El gremio salió al cruce con una réplica contundente
Los titulares de comercios gastronómicos de la ciudad aseguraron que no pueden conseguir empleados calificados para sus locales y manifestaron que la pandemia fue un antes y un después para la actividad. En ese sentido Carlos Mellano, de la Asociación Hotelera Gastronómica, dijo que hoy los jóvenes prefieren otro tipo de empleo más estable, aunque reconoció que el convenio de trabajo del sector no es “de los más onerosos”.
Desde el sindicato Gastronómico, su titular Sergio Ricupero, sostuvo a Rosarioplus.com que es verdad que la juventud busca nichos laborales más estables, pero que quienes “desprofesionalizan la actividad gastronómica son los malos empresarios”.
Y si bien es cierto que la pandemia hizo lo suyo, Ricupero señaló que desde hace mucho tiempo se viene bregando porque las empresas gastronómicas registren bien a sus trabajadores y se les pague lo que corresponde. “Ellos nos responden que no pueden por el costo laboral que va atado a los impuestos que cobra el Estado, que en lugar de reclamarle negrean a los trabajadores”, añadió el gremialista en torno a la actitud histórica de los empresarios del sector.
“Nosotros denunciamos que el ente que regula es el Estado y que poco hace por los trabajadores”, explicó Ricupero y precisó que esta situación de mal registro y de mala paga se da habitualmente en bares y restaurantes, no así en la hotelería y comedores de fábrica donde el personal es estable y está generalmente bien registrado.
En cuanto a la paritaria, el dirigente reconoció que existe un retraso de casi un 50% en los salarios y que una de las consecuencias “fue la pandemia” y que ese acuerdo con las patronales vence en pocos días, el próximo 31 de octubre, pero señaló Ricupero que tras esas negociaciones, “si no pagan los sueldos acordados es muy difícil que los jóvenes se sientan atraídos por la actividad”.
“Contenerlos es parte de los buenos empresarios porque después están los otros, los que buscan gente permanentemente”, dijo en relación al constante recambio de empleados que suelen hacer algunas empresas gastronómicas.