Despidos en Acindar: la UOM y la empresa acordaron reincorporaciones, pero sigue la tensión
La UOM denuncia que la siderúrgica echó a 60 obreros con el pretexto de una sanción disciplinaria por ejercer el derecho a huelga. De fondo, subyace el ajuste que la empresa inició ante la caída de la demanda y de la producción.
La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Villa Constitución denunció 60 despidos en la planta de Acindar. Como respuesta, el gremio inició este lunes medidas de fuerza que paralizó por completo la producción de la planta siderúrgica, en reclamo por la situación laboral. Por la tarde mantuvieron una reunión y acordaron que los despedidos se reincorporen este martes.
“Los trabajadores que venían con sanciones factibles de despidos quisieron ingresar a sus puestos de trabajo este lunes y no los dejaron entrar. Estas diferencias se dan en medio de la discusión paritaria y mientras la fábrica pretende avanzar en achiques de sector y nuevas metodologías”, aseguró a Rosariolpus.com Silvio Acosta de UOM Villa Constitución.
Durante la tarde se dio una reunión entre delegados de la UOM y representantes de la empresa, quienes comunicaron que se daría marcha atrás con al decisión de no dejar ingresar a los 60 empleados. Este martes volvería todo a la normalidad.
Pero esto no es todo, ya que también está en juego la discusión paritaria del sector que no termina de resolverse. Por ello, Acosta advirtió que si no hay una respuesta este martes por parte de la empresa, los trabajadores irán a una medida de fuerza.
Lunes de conflicto
Desde el gremio alertaron cerca del mediodía que la planta estaba parada en su totalidad como respuesta a un ”intento de sanción" disciplinaria por parte de la empresa del grupo Arcelor Mittal hacia unos 60 trabajadores “por aplicar el derecho a huelga”. Aseguran que se trata de un "intento de achique en un sector en el medio de un conflicto por discusiones paritarias".
La tensión se incrementó luego de que, en la última reunión paritaria, Acindar planteara un significativo recorte de costos que incluiría modificaciones en las condiciones laborales. Mientras tanto, las negociaciones continúan sin resolución y crece la incertidumbre entre los trabajadores.
Desde el gremio advirtieron que las medidas de fuerza se mantendrán hasta que la empresa retroceda en su postura y se garantice la estabilidad laboral en la planta.
En el caso de Acindar, el factor determinante es el corte abrupto de la obra pública y el consecuente desplome de la demanda de acero. Por lo tanto, desde hace poco más de un mes el personal rota en suspensiones cada quince días, y cobra el 80% del sueldo.
Con ello, cayeron unos 300 puestos entre retiros voluntarios y finalizaciones de contrato. Y la crisis se expande a una estela de talleres y metalúrgicas cuyo funcionamiento depende directo de Acindar.