La desaceleración del consumo, las estrategias de la población para recortar gastos, hicieron mella este invierno en la gastronomía rosarina. En consecuencia, la plaza local vio mermar su actividad y, por lo tanto, hubo una contracción de ese mercado laboral.

El secretario gremial del Sindicato de Trabajadores Gastronómicos de Rosario, Sergio Ricúpero, estimó que en esta temporada invernal en la ciudad se perdió el 20 por ciento de los puestos de trabajo que ocupaba el sector de bares y restaurantes. No obstante, entrevió signos de alguna recuperación, propia de la temporada primaveral que propicia más estas salidas de esparcimiento. 

“La baja de la actividad en los puestos formales tuvo un 20% de caída, y hubo traspaso, es decir trabajadores que salieron del mercado formal al mercado informal, que siempre tiene esta actividad de bares y restaurantes”, dijo Ricúpero. 

El gremialista señaló al rubro gastronómico como el más afectado durante el aislamiento social que impuso la pandemia de coronavirus, y desde entonces pelea una situación delicada.

“Hicimos el esfuerzo el sindicato, la cámara empresaria, hemos avanzado en mejoras salariales. Pero seguimos viendo que en algunos lugares los sueldos son testimoniales. Esperamos que la cosa mejore y se reconozca a nuestros compañeros, que vienen aguantando desde la pandemia hasta acá, y que han pagado con pérdida de puestos de trabajo y desmejora salarial”, finalizó.