El grupo que controla la marca frigorífica Swift en Argentina decidió suspender sus operaciones en los establecimientos de Villa Gobernador Gálvez y Venado Tuerto a raíz de la falta de precios de referencia que sufre el mercado de hacienda.

El escenario devaluatorio post Paso electoral impactó de lleno en la actividad diaria, con la consecuente paralización de la planta que cuenta con 2500 empleados directos. La directiva fue darle vacaciones a todo el personal, con el objetivo de retomar cuando la situación económica se normalice.

Según indicaron al portal económico Puntobiz voceros de la firma, el costo de la hacienda se incrementó un 50% en las últimas semanas, sumado al salto devaluatorio del 22% hoy les resulta “inviable” concretar exportaciones.

El plan de emergencia incluye otorgar vacaciones a todos los empleados a partir del lunes 21 de agosto por tiempo indeterminado. Por el momento no hay certezas sobre cómo continuar en caso de que las dificultades prevalezcan al regreso de ese receso.

Desde el sindicato de la carne no pudieron ocultar la preocupación por lo sucedido y reconocieron que hay una merma de trabajo en distintas plantas, en parte por la caída del consumo interno. 

En su reaparición tras la derrota electoral, el candidato a presidente por Unión Por la Patria, Sergio Massa, anticipó en una entrevista televisiva que "habrá anuncios para estabilizar los precios y para amortiguar el daño que al devaluación provocó en el bolsillo de la población". 

El lunes el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, tuvo que salir a desmentir un supuesto cierre de las exportaciones de carne y ratificó con seguirán negociando precios para el abastecimiento interno.

La empresa Swift desarrolla y produce alimentos cárnicos para el consumo interno pero también destina un importante volumen para comercializar al exterior. La decisión tomada este jueves fue un claro llamado de atención para el gobierno nacional.