Cristina recusó al juez Bonadío y le apuntó a la familia Macri
La ex presidenta en su declaración escrita pidió el apartamiento del juez y del fiscal Stornelli, rechazó los cargos y denunció una persecución judicial y política. Involucró a los Macri y allegados dentro de la patria contratista que monopolizó la obra pública en los últimos años
La ex presidenta Cristina Fernández, al presentarse este lunes en los tribunales federales de Comodoro Py, en Buenos Aires, rechazó los cargos que le endilga el juez Claudio Bonadío por presuntos hechos de corrupción y abonó la hipótesis de una campaña judicial librada en su contra y en la de su marido fallecido, el ex presidente Néstor Kirchner: "Desde el 10 de diciembre de 2015 me armaron seis causas penales y todas ellas fueron radicadas en Comodoro Py. De las seis, cinco fueron iniciadas e impulsadas por Bonadío. ¿Milagro? No. ¿Fórum shopping?", disparó la actual senadora nacional en el escrito que dejó en el juzgado.
Fernández concurrió esta mañana a la citación librada por Bonadío, en el marco de la causa que dispararon las fotocopias de unos cuadernos escritos por Oscar Centeno, ex chofer del funcionario K Roberto Baratta, y en la que apuntó una serie de cobros de dinero negro por parte de empresas beneficiadas con licitaciones de obra pública.
El escrito que dejó la ex presidenta ella resalta que se trata del cuarto expediente en el que se la acusa como jefa de una asociación ilícita mientras que "en todas las instancias judiciales" se le negó el pedido de realizar "una auditoría de toda la obra pública realizada entre 2003 y 2015".
La ex mandataria pidió la recusación de Bonadío y del fiscal Carlos Stornelli. "Desde el 10 de diciembre de 2015 me armaron seis causas penales y todas ellas fueron radicadas en Comodoro Py. De las seis, cinco fueron iniciadas e impulsadas por Bonadío. ¿Milagro? No. ¿Fórum shopping?", ironizó. Y sobre el nudo de las sospechas vertidas sobre su gestión, recordó que el PRO rechazó sus pedidos de que la obra pública de su gobierno fuera sometida a auditoría. "Mauricio Macri, hijo de Franco, primo hermano de Ángelo Calcaterra, hermano del alma de Nicolás 'Nicky' Caputo" son "socios entre sí y de otros empresarios en materia de energía y obra pública" y "emblemáticos" integrantes de la "patria contratista" presente en la historia de las contrataciones estatales desde la dictadura militar. "Hay abundante bibliografía, investigaciones y documentación que dan cuenta de un problema estructural de nuestro país", remarcó.
De esa manera, la declaración de Cristina criticó la "patria contratista" y recordó a la familia del presidente del gobierno de Cambiemos como protagonista de ese grupo de empresarios, al señalar que "resulta ridículo" apuntar al ex presidente Néstor Kirchner como organizador del "sistema de cartelización de la obra pública a partir del 25 de mayo de 2003, en un país cuyo presidente es Mauricio Macri".
Cristina Fernández solicitó, además, la nulidad de la causa al señalar que hubo elección arbitraria del juez y del fiscal, y sostuvo que su llamado a indagatoria fue una "decisión política del Poder Judicial en coordinación con el Poder Ejecutivo y los medios hegemónicos".
Como remate, Fernández calificó a Bonadío como "juez enemigo" y protagonista de "la nueva estrategia regional para proscribir dirigentes, movimientos y fuerzas políticas que ampliaron derechos y permitieron salir de la pobreza a millones de personas durante la primera década y media del siglo XXI".